levamos semanas escuchando voces en contra de la jornada continua y, en verdad, nos sentimos decepcionadxs porque se nos olvida por el camino cuál debe ser nuestra meta.

Nos duelen las noticias y titulares seleccionados interesadamente a favor de la jornada partida escolar. Porque parece que lo más importante o lo único que importa para algunxs es recuperar el horario establecido antes de la pandemia.

Nos ha tocado vivir un curso escolar duro y sabemos que no ha sido fácil gestionarlo. Pero a pesar de todo esto, hay también familias que hemos sobrellevado el curso de una manera mucho más amable de lo que esperábamos. Puesto que la jornada continua nos ha ayudado a conciliar la vida escolar y laboral. Y por lo menos hemos vivido un año más tranquilo que los anteriores.

A quienes se dedican a difundir valoraciones en contra de la jornada continua les quisiéramos decir que la jornada partida nos ha condicionado mucho más nuestra vida en cursos anteriores, obligando a lxs txikis a hacer jornadas escolares parecidas o más largas que nuestros horarios laborales.

No decimos que las cosas se hayan hecho bien, sino que aquellos que hablan de la obligatoriedad, tendrían que tener en cuenta que el horario que teníamos nos hacía mucho más esclavos de la escuela. Y que se imponía de la misma manera, sin que todxs lo quisiéramos y sin que nadie nos lo preguntase.

La jornada partida era lo que siempre había existido y simplemente por eso debería seguir, sin tener en cuenta qué jornada es la más beneficiosa para el alumnado tanto en rendimiento escolar como en ambiente de clase.

Queremos remarcar que en vez de pedir un horario u otro, nos debemos marcar como objetivo medidas que resuelvan de mejor manera la vida escolar: actuaciones administrativas para la conciliación familiar y laboral, flexibilidad para elegir horarios escolares por las familias en función de sus circunstancias y necesidades, poder realizar actividades extraescolares (tanto las ofrecidas gratuitamente por el centro como por las Apymas), bajar las ratios, asegurar recursos humanos desde Educación, aunar criterios para hacer salidas y utilizar los espacios exteriores, cuidar la educación emocional... En una palabra, para que independientemente de la situación de salud que nos toque vivir, tengamos un Sistema de Educación de calidad que gire en torno al alumnado.

Además en Navarra, a principios del curso surgió un foro muy interesante que aglutinaba a las familias, sindicatos y escuelas, para intentar aliviar las medidas del protocolo establecido en Educación. Pero no tuvo gran recorrido. Lástima. Podría/puede ser un camino muy interesante.

Creemos que estamos a tiempo de hacer algo y, de cara a poder hacer mejor las cosas, pensamos que primeramente nos deberían preguntar a quienes constituimos la comunidad educativa qué opinamos al respecto. Sin que nadie hable por nosotrxs. Para que, dejando de lado nuestros intereses, pongamos en el centro del debate cómo mejorar el futuro de nuestrxs txikis: verdaderos protagonistas de la escuela por encima de los intereses políticos, económicos, profesionales y familiares.

Seamos sinceros... hagamos camino!!

*Los autores son un grupo de padres y madres a favor de la jornada continua en Patxi Larrainzar IP

En vez de pedir un horario u otro, nos debemos marcar como objetivo medidas que resuelvan de mejor manera la vida escolar

*Mikel Ripodas Hermoso de Mendoza, Nerea Etxegarai Garaikoetxea, Ion Zeberio Morrás, Oihana Garmendia Peña, Amaia Hualde Unanua, Laura Goikoetxea Calvo, Pablo García González, Patricia Remiro Virto, Ilargi González Ochoa, Elixabete Ansa Otermin*