Desde que se abrió la veda han proliferado los libros que sacan a la luz los fragmentos más oscuros de los miembros de la familia real española. Había donde hurgar, cuentas pendientes de cortesanos desatendidos, servicios secretos indiscretos, gente con ganas de hablar y editoriales dispuestas a hacer negocio. Juan Carlos ha suministrado inagotable material para títulos como ‘El rey de las cinco mil amantes’, ‘Una monarquía nada ejemplar’ o ‘El precio del trono’; la despechada Sofía protagoniza volúmenes como ‘La soledad de la reina’ y Letizia no se libra de sus críticos en ‘La reina impaciente’ o ‘Adiós princesa’. Hay más, pero no creo que ninguno alcance el nivel de provocación ni desencadene el terremoto que está desatando el contenido que se va desvelando de la biografía del príncipe Harry de Inglaterra. En todo lo que está saliendo a la luz hay mucho de promoción, imagino, pero el muchacho se salta todas las líneas rojas en una venganza por capítulos y dicen que generosamente remunerada. Tampoco es que haya crecido en una familia ejemplar: hasta la muerte de su madre, Diana, está envuelta en sospechas. Yo en su lugar miraría los bajos del coche antes de ponerlo en marcha porque parece que entre los de sangre azul hay mucha mala sangre. Ya espero con impaciencia un libro que tarda en llegar: ‘Froilán lo cuenta todo’. Atentos.