Incombustible personaje público: Celebro que, rozando con la yema de los dedos los 80, siga dando guerra. Leo en El País que hasta acaba de estrenar un podcast titulado, con pelín de egolatría entreverada de marketing, Suena Carmena. No está entre mis prioridades gastar tiempo en escuchar homilías, pero le prometo que en mi lista sus parraplas están antes que las de su antiguo amigo y hoy archienemigo Iglesias Turrión. En la correspondiente entrevista promocional en la cabecera de Prisa deja también un titular muuy cabroncete: “No corregir la ley del sí es sí es soberbia infantil”. Y yo, que no soy ni de lejos su primer fan (le recuerdo un par de faenas que me hizo), asiento al tiempo que echo de menos que cuente cómo ha de hacerse.