La cuantía mínima que una persona podrá percibir en el Estado español por trabajar 40 horas semanales serán 1.080 euros al mes en 14 pagas. En términos anuales, el salario aumentará en 1.120 euros: de los 14.000 euros anuales actuales, a 15.120 euros al año. Un 8% más de subida al igual que las pensiones, por debajo de lo que reclamaban los sindicatos (1.082-1.100 euros) y por encima de lo propuesto por la patronal (1.040 euros). Y sin olvidar que hace cuatro años era de 735,9 euros. En todo caso una buena noticia que beneficia a 28.000 trabajadores en Navarra y según expuso esta semana CCOO, con un perfil que se corresponde con una mujer de entre 16 y 34 años, con contrato temporal y trabajadora del sector agroalimentario y de los servicios. El salario mínimo es una herramienta que asegura que incluso aquellas personas trabajadoras que están en peores condiciones puedan vivir dignamente de su empleo. Y ciertamente no es posible construir una sociedad cohesionada, justa y una vida digna sin salarios que lo hagan posible. A partir de ahí habrá que garantizar que las administraciones no sólo cumplan con estos mínimos sino que tampoco se desentiendan de su aplicación en los contratos públicos de servicios que mantiene con sus empresas contratistas. Será también todo un referente para el mantenimiento del poder adquisitivo de los salarios en la empresa privada en un momento en el que los precios de la vivienda y de los productos básicos han subido por encima de un IPC que se situó en enero en el 5,8%. Una subida eso sí insuficiente para sindicatos como ELA y LAB que defienden subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 1.400 euros en la CAV y Navarra, ya que consideran que la subida anunciada por el Gobierno de España hasta los 1.080 euros brutos no supone el 60% del salario medio en la Comunidad foral. Entienden además que no es aceptable “una subida salarial mínima del 8% si el precio de los alimentos ha crecido un 15%”. Y sólo con los precios de los alquileres de la vivienda en Navarra tendrían razón porque se llevan más de la mitad del SMI. Se dice pronto pero los mil euros es lo que cobran muchos jóvenes con contratos precarios. Y, puestos a comparar, lo que piden ahora los médicos de Navarra que se les suba de golpe en su sueldo. Un sustento básico para unos, un plus para otros según se mire.