El Ayuntamiento de Estella-Lizarra vuelve a arremeter contra el euskera. Esta vez el sopapo se lo llevan las niñas y niños de quinto de primaria del Colegio Público Remontival y de la Ikastola Lizarra, que se quedan sin la segunda mitad del curso de bertsolaritza. La primera parte la han dado, subvencionada por el Departamento de Educación, que define así esta iniciativa: “El programa Bertsolaritza irakaskuntzan tiene por objeto incrementar las capacidades comunicativas, especialmente la expresión oral incluyendo los usos espontáneos de la lengua, a través de la modalidad específica que supone el bersolarismo. El verso fomenta en el alumnado la confianza y seguridad en sí mismo, haciéndole ver que puede mejorar su comunicación y reforzar su fluidez verbal.”

Bueno, pues todo esto al Ayuntamiento de Estella-Lizarra le importa más bien nada y ha decidido no asumir la financiación de la parte que le correspondía, descolgándose así de esta actividad que tantos años lleva funcionando a las mil maravillas en decenas de centros escolares de toda Navarra.

Esto es lo que ha denunciado esta semana la asociación estellesa Bagara, que recuerda también que este ayuntamiento decidió salirse del programa Euskara Merkataritzan, suspendió el programa Brinka dirigido al público infantil, se negó a comprar un kilómetro de la Korrika, no programó espectáculos infantiles en euskera en las fiestas y redujo drásticamente las partidas presupuestarias destinadas al euskera.

La misma actitud prepotente con la que desterró a las txoznas en las fiestas del pasado mes de agosto, encarándose con medio pueblo. Malos tiempos para la lírica en la ciudad del Ega.