Carta al odio
El odio es la aversión a una persona o cosa cuyo mal se desea. La aversión es repugnancia.
Hay odios mayestáticos como el de los palestinos a los judíos y de éstos a los nazis, o el de los sunitas a los chiitas y a la inversa: todos ellos creyentes del mismo Dios. Otros son mucho más subterráneos hasta que explotan, como el del trabajo al dinero, del rico al pobre, resumido en aquello de trabaja más y gana menos. El pan nuestro de cada día. El gusano invisible que carcome a las generaciones, de padres a hijos, entre hermanos, entre falsos amigos, entre el interés y la necesidad.
El odio es ese animal que camina en una noche de invierno, lluviosa y fría, pegado a las paredes de las calles con capucha calada, pantalones vaqueros, que en vez de disfrutar de la parranda se dedica a enviar postales, llamar a los timbres de los portales o al teléfono, y, sin dar la cara, amenaza e insulta, escapando bajo la capucha y la noche. Un odio cobarde como el de los gatos y las ratas. "Sabes que te digo: que me mearé en tu tumba, hijo de p?" Y el odiado lo espera y lo busca para cortarle las pelotas antes de morir, mientras decide que lo incineren para quitarle el gustazo al siniestro personajillo, por si acaso.
Sería más bonito hablar de cosas como Fidias en el Partenón, pero resulta que muchos siglos más tarde en la Grecia clásica sale a flote el odio popular en forma de huelgas generales, de lucha de desesperados en las calles, de amenazas de bomba en las embajadas, etcétera, y todo esto hace temblar al gran dinero, que es quien ha provocado semejante trifulca, y ya sabemos que lo más miedoso del mundo es un millón de dólares y sus reacciones a través del poder son terribles. (...)
También los hay como Catón, que murió a los 85 años (edad asombrosa para los años 200 de Roma) después de haber conseguido todas las satisfacciones, incluida la de hacerse muchos enemigos, cosa que le agradaba particularmente.
Afortunadamente, también existen sentimientos, frases y palabras como sweet love, ternura y maite zaitut, "imagine? que no existe el cielo o el infierno?".
¡Feliz año! Urte berri on.