Siempre es un orgullo ver noticias positivas como: Berasategui, con su décima estrella Michelín, el más condecorado de España y el cuarto del mundo.

Trabajo en la hostelería, y como en todas las profesiones el saber nunca ocupa lugar, y sobra decir ya estoy suficientemente formada porque los clientes buscan el mejor servicio en la mesa y la mejor calidad en el producto.

Agradezco a todas las escuelas de hostelería que con su mayor ilusión y profesionalidad lleguen a formar futuros cocineros con un gran prestigio.

Este año estamos en mi empresa haciendo un curso en la Escuela Superior de Artxanda en Bilbao, en el cual estoy impresionada de la categoría de los profesores y de su preocupación de que esas horas nuestras sirvan tanto para nosotras y para el prestigio laboral en España, de ahí el porqué tanta gente quiere visitar San Sebastián, Bilbao, Vitoria, Pamplona, porque la barra de pintxos y la mesa en los restaurantes habla por sí sola.

Por eso, y muchos motivos más, animo a tantos jóvenes que están iniciando sus primeros años en la enseñanza en la hostelería, que no tiren pronto la toalla y que tengan esas ganas de llegar a ser unos maestros de la cocina. Eso lleva muchas horas delante del fogón y delante de los libros para saber los porqués de cada elaboración.

Zorionak a Berasategui por tu décima estrella Michelín, y a tantos cocineros que tienen en sus vidas la ilusión por enseñar. Y la mayor felicitación por el 25 aniversario de su restaurante. ¡¡Garrote!!