Lo que viene ocurriendo en este país con los trenes, sobre todo en Extremadura y en otros lugares como Teruel, Granada y Galicia, es totalmente denigrante. Que en un trayecto como Madrid-Badajoz o Cáceres, un tren pueda tardar 5 horas, ya es un caso, pero que muy de vez en cuando estos trenes destartalados, sin mantenimiento ni conservación adecuados, se estropeen ya es de desvergüenza absoluta, y que autobuses, taxis y otros medios de socorro procuren que los viajeros lleguen con 4 horas de retraso y después de pasar frío y penurias en un descampado y a las 23.00 de la noche, también es muy preocupante. Hasta hace unos 15 años, al menos la “asistencia al viajero” y los puestos de mando tenían un sistema de socorro con autobuses y taxis que más o menos funcionaba adecuadamente, y además los agentes de Renfe o Adif colaboraban en esos trasbordos para facilitar la labor a los viajeros. Ahora, o desde hace unos años, lo que ocurre es injusto y desagradable, y más cuando van niños, mujeres y gente mayor. A ver cuándo y de una vez por todas los responsables de Renfe Viajeros, en lugar de pedir disculpas, hacen mucho mejor su labor, ponen mejor material rodante, mejoran las vías y las estaciones y apeaderos del trayecto y mejoran las condiciones del personal de servicio a bordo (interventores y maquinistas o azafatas) porque al fin y a la postre son los que dan la cara y son los que se llevan la peor parte. En un servicio público como Renfe deben poner al mando directores y gerentes competentes y no solo personal superior que esté cómodo en sus gran despacho, cobrando unos sueldazos y que los de a pie, con mucho esfuerzo y profesionalidad, tengan que ser “los paganos”. A ver si el nuevo ministro de Transportes y sus direcciones generales trabajan más y mejor por las cercanías, regionales, media distancia y trenes convencionales, y no que todo el dineral y todos los mantenimientos estén centrados en los TAV-AVE, que a su vez son los más deficitarios, pero los que se llevan todos los miles de millones de euros, aunque el Tribunal de Cuentas de la UE haya emitido dos informes negativos al Gobierno por considerar deficitaria esta construcción y esta ejecución del TAV. No soy muy experto ni economista, pero con 40 años de servicio en Renfe y Adif (1967/2008) creo que puedo realizar esta crítica a los responsables de estos servicios, y también a los políticos de esas CCAA, para que ese servicio público (Renfe y Adif) funcione como es debido.