Somos un colectivo que raramente recurre a los medios de comunicación, algo que al parecer si que hace el Departamento de Salud cuando le conviene, pero el que no aclaremos la información que se publica sobre nosotros no quiere decir que sea cierta.

Hace unos días el Departamento de Salud hacía pública que “la contrapropuesta del SMN es desproporcionada e inasumible y además insolidaria con el resto de colectivos profesionales y la sociedad”.

Habla de una subida salarial de más de 15 millones de euros anuales para los médicos, pero no dice que aún estamos cobrando menos que en el 2008 mientras que otros colectivos están cobrando un 13% más que entonces. Los recortes que se nos aplicaron a los médicos no se han recuperado aún, como ha dicho el Departamento de Salud en múltiples ocasiones.

Afirma que estamos bien pagados y que no tenemos motivos para quejarnos, pero no dice que aquí al lado, en el País Vasco, un facultativo en igualdad de condiciones de trabajo y antigüedad cobra al menos 800-1.000 € mensuales más que en Navarra y las festividades de Navidad tienen una remuneración especial, mientras que en Navarra es igual trabajar Nochebuena o Año Nuevo que el domingo que viene.

Nos emplaza a la mesa general para negociar nuestro salario, donde no tenemos representación sindical y nuestros intereses no son escuchados ni defendidos.

Resulta muy fácil menospreciar una vez más a los médicos dando información incompleta y haciéndonos responsables frente a la población de una huelga no deseada por nosotros, por las repercusiones que tiene para la población y también para nosotros, y que es fruto de su incapacidad para realizar una adecuada gestión de los recursos y de escuchar a sus empleados.

Las condiciones laborales deterioradas, las agendas imposibles, los escasos tiempos de atención al paciente, las jornadas interminables, la escasa docencia, etc, darían para otro tanto.

La población tiene que saber que no estamos pidiendo una subida salarial, sino unas condiciones laborales adecuadas que garanticen una atención segura y óptima del paciente, y eso también incluye que se nos remunere de acuerdo al trabajo que desempeñamos y la responsabilidad que tenemos.