unque ha tardado en ocurrir, ya han comenzado las quejas vecinales por las diferentes colonias de gatos asilvestrados y abandonados de Pamplona.

En este caso ha sido en el barrio de la Txantrea, debido a la suciedad e insalubridad que estos grupos felinos crean, con la consiguiente presencia de palomas, cucarachas y materiales que diferente gente aporta para el bienestar de los gatos, como tupers, plásticos, mantas y restos de comida que termina pudriéndose...

Y es que el problema de estas colonias es mucho más grave de lo que pensamos, lo que pasa es que hasta que no nos ha afectado a nivel personal directamente, no hemos sido capaces de mover ficha€

Los gatos abandonados son a día de hoy uno de los mayores problemas en todo el mundo en lo que a pérdida de biodiversidad se refiere€ Aunque estos grupos estén alimentados por el ser humano (estas colonias tienen un gestor autorizado que las alimenta, además de muchas otras personas que lo hacen de forma voluntaria e ilegal sin autorización ninguna), no pierden el instinto animal y cazan todo lo que pueden.

Esto está avalado a nivel mundial en infinidad de estudios científicos, y son continuos los informes y datos que salen tanto de biólogos como de diferentes asociaciones y colectivos.

Por ejemplo, los felinos asilvestrados matan a unos mil millones de aves cada año en EEUU; el lagarto grande de La Gomera y el lagarto moteado de Tenerife están en serio peligro de extinción por la presencia de gatos en las islas (y es que en las islas, el problema de los gatos abandonados aún es más grave para la fauna del lugar); en Australia, los gatos llegan a matar hasta un millón de pájaros al día y está considerada como una de las razones del actual declive de muchas especies (de hecho, se han invertido 20 millones de euros para erradicar el problema de las colonias gatunas). Son ya más de 30 las especies que se han extinguido en todo el mundo por gatos abandonados.

Tenemos que tener claro una cosa€ El problema de estas colonias urbanas no es la suciedad que pueden producir sino la existencia de la colonia en sí, que generalmente crecen desmesuradamente por el efecto llamada que se produce a quien se ha cansado de su gato y lo suelta en el lugar donde ya hay gatos asentados para que tenga compañía.

Lo lógico sería, poco a poco, que estos grupos felinos desaparecieran de la ciudad, pero no es así porque la gente sigue abandonando gatos, algo que habría que sancionar de manera más dura€

Reflexionemos un poco... ¿Por qué no hay colonias de perros abandonados en nuestra ciudad? ¿A alguien se le ocurriría que comenzáramos a tenerlas? Seguro que no€ Pues lo mismo tiene que pasar con los gatos€

Estas colonias tienen que desaparecer, ya no solo por nosotros, sino por el bien de la biodiversidad urbana, a la que bastante castigada tenemos ya€

Los gatos abandonados hay que gestionarlos de otra forma, no así.