eñora consejera: Después de que el día 4 de agosto y, posteriormente, el día 6 de agosto a través de una llamada telefónica suya, se me informara de que el COA de Marcilla lo van a utilizar como centro de aislamiento para aquellos menores extranjeros recién llegados que den positivo en coronavirus, me gustaría hacerle los siguientes comentarios.

En primer lugar, me hubiese gustado que la primera comunicación hubiera salido de su departamento y no por otros medios. Creo que el tema es lo suficientemente importante como para que se comunique al Ayuntamiento y, por lo menos, se nos indiquen protocolos, planes de contingencias y otras medidas que vayan a tomar.

Afirmar que van a utilizar el COA como centro de aislamiento me parece un poco atrevido, cuando se ha demostrado la incapacidad del centro para aislar a los propios residentes actuales que, durante el aislamiento que han tenido por un positivo por covid-19, hemos observado cómo los residentes abandonaban impunemente y con total tranquilidad el centro todos los días y que, después de ponerlo en conocimiento de la dirección del centro, no se ha tomado ninguna medida al respecto ,y si las han tomado, no han sido ni suficientes ni efectivas.

Esta medida va a incrementar también el trabajo de los profesionales de la zona básica de salud de Peralta. Le informo al respecto que esta zona de salud está a punto del colapso, con médicos completando dobles agendas de atención a pacientes, haciendo guardias de más de 50 horas seguidas. Tenemos a las enfermeras empalmando sus guardias con la jornada laboral. El centro no dispone de material para las salidas ni equipamiento y, mientras, el gerente del servicio de Atención Primaria les sugiere que se compren ropa en los chinos. Además, en octubre, la mitad de la plantilla de la zona básica de salud se va, ya sea por jubilación o por traslados, y no hay indicios de que vayan a reponer las plazas.

Por otro lado, el centro está junto a nuestra residencia de mayores. Puede que no pase nada y que los residentes aislados en ese centro no tengan contacto alguno con residentes o trabajadores de la residencia, pero es un riesgo que no podemos asumir.

Creo sinceramente que los planes que tienen para este centro van a poner en riesgo a los actuales residentes, a los trabajadores del centro, a sus familias y, por ende, a los habitantes de Marcilla y que, si no se toman medidas complementarias, sería una irresponsabilidad y una inconsciencia.

Ya, por último, le pido que recapacite esta decisión, ni el centro ni el área básica de salud de la zona están preparados, a día de hoy, para atender este servicio, y lo único que va a conseguir es poner en riesgo a mucha gente innecesariamente.

Un saludo.

El autor es alcalde-presidente del Ayuntamiento de Marcilla