Soy profesor de Secundaria. Estaba dando clases y me suena el teléfono. No lo cojo. Termino de dar la clase y me dicen que alguien ha llamado al centro comunicando que mi hija ha dado positivo. Me entero de que una parlamentaria del PSOE ha llamado al centro sobre las 10.30 horas al instituto diciendo que mi hija ha dado positivo. De malas maneras. A mi hija se lo comunican a la 13.00 horas. A mí, profesor, sobre las 20.45 horas de la noche.Ella tuvo acceso, como representante publica a una información que yo como profesor no tengo. Por decisión propia me confino regresando a Tafalla, ella no, y voy directamente al centro de salud. Explico mi situación y me informan que no estoy confinado hasta que no me llamen, pero que debo confinarme. Deduzco que ciertas políticas están por encima del profesorado. Así nos va.