egún Amnistía Internacional, en España entran cada año entre 40.000 y 50.000 víctimas relacionadas con la trata. Detrás de la aséptica expresión "entrada", se esconde todo un ciclo de sufrimiento en el que las víctimas son captadas con engaños, trasladadas lejos de sus entornos familiares para desarraigarlas y alojadas en distintos sitios durante el proceso de tránsito y durante su explotación. Las cifras mundiales de esta práctica delictiva nos hablan de tres millones de personas esclavizadas, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT). De ellas, cerca de la mitad son menores de edad, las dos terceras partes de las víctimas son mujeres y el 79% de las víctimas lo son con fines de explotación sexual. Números que asustan y que, sin lugar a dudas, nos llevan a considerar que la trata de seres humanos es la esclavitud de nuestro tiempo.

Hoy, con motivo de la conmemoración del Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas, nos unimos a las voces que denuncian que esta esclavitud moderna supone una profunda violación de los derechos humanos, de la dignidad y de la libertad de la persona y constituye una forma de delincuencia grave, que en la mayoría de las ocasiones implica a organizaciones delictivas a las que proporciona importantes beneficios basados en la utilización de las personas con distintos fines de explotación, principalmente mujeres y con fines de explotación sexual. Estamos ante una de las más crueles manifestaciones de la violencia contra las mujeres, que constituye una vulneración de nuestros derechos fundamentales, que está recogida en nuestra Ley Foral para actuar contra la violencia hacia las mujeres como una de las manifestaciones de la violencia contra las mujeres, con el mandato de articular medidas para su prevención, sensibilización, atención y reparación del daño.

Para avanzar en la erradicación de la trata, el Gobierno de Navarra cuenta con un servicio de acogida para víctimas de trata, un espacio seguro que facilita la recuperación de las víctimas a través de una atención integral que abarca aspectos psicológicos, sociolaborales y jurídicos como lo establece nuestra Ley Foral de Igualdad. Además, desde 2011, promueve el Foro Navarro contra la trata de mujeres con fines de explotación sexual y cuenta, desde 2016, con el Protocolo de coordinación y actuación con mujeres y niñas víctimas de trata con fines de explotación sexual en Navarra.

Este año 2020, tan complicado para todas y todos debido a la pandemia motivada por la covid-19, lo está siendo aún más si cabe para estas mujeres y niñas, en su mayoría explotadas sexualmente, que han visto deteriorarse sus condiciones de vida durante el estado de alarma (confinamientos en habitaciones insalubres, sin alimento, sin un mínimo de confort, aisladas del exterior€) durante el estado de alarma. Se ha generado una situación de extrema dificultad para las mujeres en contextos de prostitución en nuestra comunidad. Ante ello, el Gobierno de Navarra ya ha comenzado a mantener reuniones con las entidades que trabajan en el ámbito de la prostitución para diseñar un plan de acción que ponga el bienestar de estas mujeres en el centro del análisis.

No obstante, si queremos erradicar este delito, tenemos que cambiar el imaginario social sobre la demanda de servicios sexuales que la Unión Europea, en la estrategia para la erradicación de la trata de seres humanos, identifica como una de las principales causas de la trata con fines de explotación sexual. Esta demanda no se circunscribe a países lejanos, sino que se trata de una realidad próxima, que tratamos con tolerancia, sin reconocer las situaciones de esclavitud que genera. Por eso, este Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas, es un día para la denuncia, pero también para la reflexión sobre cuáles son nuestras prioridades y valores como sociedad.

La autora es directora gerente del Instituto Navarro para la Igualdad