He escrito aquí varias veces sobre distintos aspectos de lo que ha supuesto el árbol en Navarra. Ha sido el árbol, a través de la historia, un elemento cuasi sagrado; nuestros mayores valoraron siempre la ecología. ¿Hemos perdido este sentimiento? Estamos escuchando cada día que nos estamos jugando mucho en nuestro planeta. Los pronósticos para un futuro no muy lejano son estremecedores. ¿Se toman medidas? Nos decían en la escuela que los bosques aumentan las lluvias y que las plantas, entre otros efectos, generan vapor de agua. ¿Qué podemos hacer? Yo muy poco, quizas reciclar mejor. Mi Ayuntamiento un poco más; puede llenar los rincones de árboles. Y Navarra aún más; conservar el Irati, Urbasa, Aralar...que nos dejaron nuestros mayores, usar hasta el Canal de Navarra para también repoblar. Muchos pocos hacen algo. Podemos hacer de Navarra una isla verde en España y hasta en Europa. Sobre todo dejar a nuestros hijos una Navarra mejor.