Hace tiempo que, por culpa de mi agorafobia, decidí no asistir a bodas ni a funerales pero, por fuerza, el otro día rompí el compromiso para con las bodas. Se trataba de Estíbaliz y Javi, sobrinietos con los que he compartido muchas cosas. Ella, incluso, mientras estudiaba el bachiller, vivió dos años en mi casa. Con los dos, muchas salidas al monte; Txurregi y Gaztelu, Beriain, S. Miguel, Trinidad de Erga, Echauri, Higa, Izaga, Arangoiti, Oroel (en Jaca), Gorbea (con otra Estitxu de Gasteiz), la lista es larga. La cosa es que, unas semanas antes, me dijo "abuelo, por qué no preparas un escritico de los tuyos, para leerlo en la ceremonia..." (Iba a ser una boda moderna y sin iglesias de por medio). Y lo preparé. En euskera y castellano.

"Hobe mendian bageunden. Agindu nuen ez nintzela joango ezkontza eta hiletetara. Baina hemen naukazue. Estibaliz eta Javi oso gertutik hazten ikusi ditudalako. Eta badakite zer sentitzen dudan haiengatik. Javi, kontuz ibili. Badakizu, "peligro inminente, riesgo total". Bi urtez bakarrik bizi izan nintzen Estibalizekin, eta ordutik "puto abuelo cabrón" titulua atera nuen. Zortea biontzat. Mejor estábamos en el monte. Prometí no asistir a bodas y funerales. Pero aquí estoy. Porque he visto crecer muy de cerca a Estíbaliz y Javi. Y saben lo que siento por ellos. Javi, ten cuidado. Ya sabes, "peligro inminente, riesgo total". Conviví solo dos años con Estíbaliz, y desde entonces saqué el título de "puto abuelo cabrón". Suerte para los dos".

Al no dominar el euskera como para memorizar el texto, aunque corto, decidí usar las nuevas tecnologías y lo ubiqué en Drive para leerlo en el móvil. Cuando salía de casa y cogía lo imprescindible, decidí dejar el móvil, por incordio, sin recordar el escrito. Así que pasó lo que tenía que pasar. Llegó el momento, empezaron a buscarme y yo no aparecía. Y es que, además, se juntó tal gentío para la ceremonia que mi agorafobia me empujó a escapar directamente al lugar de la comida, donde me habían prometido un lugar estratégico en la mesa más próxima a la puerta de salida, como así fue. No voy a contar las broncas a que tuve que hacer frente después, de uno y otro bando, aunque suavizadas por las cervezas que amenizaron mi espera. Sirva este escrito para pedir disculpas y para transmitir el que figura arriba y que no leí en el momento y lugar adecuados. Barkatu eta eskerrik asko.