Escuché decir a una compañera de la universidad: "Yo sin maquillarme y plancharme el pelo no salgo de casa". A mí me pasa igual. Al principio pensaba que lo hacía por mí, para verme yo guapa. Aunque sinceramente hay días que me apetece dormir un poco más y no despertarme tan pronto para maquillarme, pero acto seguido miro el móvil y entro a las redes sociales y lo primero que veo son a las influencers tan guapas ellas, con su pelo pantene y maquillaje perfecto, algo que automáticamente me obliga a salir de la cama y decir: "¿En serio quieres que te vean con estos pelos y estas pintas?".

Esto me hace cuestionarme si lo hacemos para vernos bien nosotras o para que los demás nos vean bien. Algo que empezó para sentirme bien conmigo misma terminó siendo una obligación que tengo que hacer todos los días.