el proyecto de construir un parking en la calle Sangüesa de la plaza de la Cruz está siendo un tema de debate ampliamente comentado entre el vecindario, comerciantes, hosteleros y todos somos conscientes de que en el barrio existen problemas con la movilidad en general y el estacionamiento de vehículos en particular. Las opiniones son muchas y diversas pero en lo que sí coincidimos la mayoría es que debemos proteger la plaza de la Cruz y sus calles adyacentes como pulmón verde saludable para el barrio y para toda la ciudad.

El parking se quiere ubicar en una de las pocas calles del Segundo Ensanche que cuenta con árboles consolidados de más de 50 años de antigüedad por lo que la eliminación de esos 46 árboles es un auténtico desastre para el barrio, que pierde esa gran masa vegetal que contribuye a que sea una de las zonas más utilizadas en verano para paliar el sofocante calor. Cuando finalice la obra dentro de 2 años todos estos frondosos árboles actuales los veremos sustituidos por pequeños árboles maceta que apenas dan sombra y sólo tienen una finalidad decorativa, por lo que en este momento de crisis climática resulta incomprensible que el Ayuntamiento promueva este proyecto de erradicación de arbolado en el barrio con las temperaturas más altas de la ciudad según un último estudio de la UPNA.

La ubicación del parking en la calle Sangüesa es totalmente inadecuada al ser una calle muy estrecha que va a exigir excavar 15 metros de profundidad en 4 plantas en tan sólo 2 manzanas de extensión y por este motivo se van a producir desperfectos en los inmuebles colindantes al ser viviendas antiguas con cimentación poco profunda.

Todo estos factores hacen que la obra sea muy cara y se dispare el precio de las plazas respecto a lo prometido, convirtiéndose en uno de los parkings de concesión municipal más caros de todo el país. El precio alcanza la vertiginosa cifra de 32.500,00 € por un plaza temporal de aparcamiento, además de gastos de mantenimiento en torno a 600 € anuales. Estos precios desorbitados hacen que la inmensa mayoría del vecindario y comerciantes no vayan a poder acceder a una plaza para sus vehículos. Si a esto añadimos la consiguiente eliminación de plazas en superficie hace que se expulse del barrio a quien no tenga medios económicos para adquirir una plaza subterránea.

Los comerciantes y hosteleros más cercanos a la zona van a ver cómo durante los próximos 22 meses no van a poder desarrollar su actividad con normalidad y muchos de ellos van a tener que cerrar el negocio porque la zona va a resultar intransitable.

La mitad de los estudiantes y muchos profesores del instituto van a tener que trasladarse a otro centro de la ciudad durante las obras, con la pérdida de horas en las itinerancias del profesorado.

El Ayuntamiento no se ha dignado todavía a notificar personalmente las contestaciones a las alegaciones planteadas y está actuando de forma inadmisible, promoviendo éste proyecto de forma unilateral, sin aprobar el PEAU del 2º Ensanche, sin proceso participativo en un asunto muy cuestionado por el vecindario. Existen alternativas que no se han querido valorar, como otra ubicación dentro del barrio, otra gestión de la plazas en superficie, promocionar los parkings de rotación infrautilizados y asignar primero las plazas libres que existen en otros parkings cercanos antes de iniciar un nuevo proyecto.

Por ello pedimos una explicación de por qué se actúa con estas prisas, contra la opinión de la mayoría de las personas que residen en la zona, e incluso en contra de la mayoría de la Corporación municipal y exigimos la inmediata paralización del expediente hasta que los ciudadanos elijamos a los nuevos concejales el próximo 28-M. Confiamos que el nuevo Ayuntamiento dé una solución al problema del aparcamiento del 2º Ensanche porque sólo con amplios consensos podremos construir un barrio digno para toda la ciudadanía de Pamplona/Iruña. Salvemos la Plaza de la Cruz y su entorno. Todavía es posible.

Etor zaitez. Acude a la concentración en la plaza de la Cruz el miércoles 24 de mayo a las 11.15 horas.

*Firman esta carta: Iñaki Aguirre y 24 vecinos/as y comerciantes