Cada vez más se difunde la idea de la generación de cristal, una etiqueta injusta y reduccionista que presenta a los jóvenes como frágiles y exagerados. Pero si observamos las últimas semanas, nos damos cuenta de que esta visión no refleja la realidad. Las nuevas generaciones están dejando todo para ayudar a sus vecinos a limpiar, rescatar y apoyar a las víctimas de la DANA en la Comunidad Valenciana.

Esta implicación y coraje demuestra una firmeza incuestionable que no tiene nada que ver con la imagen de vulnerabilidad que algunos intentan imponer. La generación de cristal no existe y queda demostrado en el espíritu de solidaridad y compromiso que los jóvenes muestran día a día.