Sorprende que un sector que en Navarra emplea a 4.500 personas y que tiene como objetivo el cuidado de otras 6.000 personas mayores, en un alto porcentaje dependientes y heterónomas, no tenga convenio colectivo. Eso pasa con los trabajadores y trabajadoras de residencias y centros de día.

Hace unos días hemos comprobado cómo el proyecto de convenio colectivo que, tras dos años de negociación, habíamos trabajado una mayoría sindical y la patronal de residencias sociales sin ánimo de lucro, embarrancaba por la oposición de una parte de ANEA, la patronal que aglutina a las residencias y centros de día de carácter mercantil y que operan fundamentalmente en Pamplona.

Desde Lares Navarra, la Asociación de Residencias y Servicios de Atención a los Mayores sector solidario, creemos que un convenio colectivo traerá progreso al sector. Pensamos que es necesario y bueno ya que no podemos poner en valor la dignidad de las personas que necesitan ser cuidadas sin hacer lo mismo con las personas e instituciones que las cuidan.

Lares Navarra y sus 43 centros asociados seguiremos trabajando por conseguir este convenio. Ojalá estos días que vienen, en los que nos gusta reconocernos en todo lo bueno que tenemos, sirvan para afinar sensibilidades y algunos empiecen a ver personas donde sólo ven negocio.

*Representante en calidad de presidente de Lares Navarra