Tragedia de la DANA

Hace seis meses ocurrió la desgracia que ocasionó 222 muertos, cuyos familiares siguen pidiendo justicia. Los responsables del tiempo ya anunciaban un fuerte temporal la víspera, por lo que la Universidad de Valencia suspendió las clases para el día 29. La Generalitat valenciana hizo caso omiso de toda predicción y mantuvo su agenda. El presidente estuvo en una entrega de premios y otros actos y luego se fue de comida seguida de una larga sobremesa mientras sus paisanos estaban con el agua al cuello, nunca mejor dicho.

Hay cosas que no se entienden, como la falta de empatía del señor Mazóncon las víctimas de la tragedia. Ya ha habido multitudinarias manifestaciones y está clara su imposibilidad de acudir públicamente a fiestas como las Fallas de Castellón o de Alicante porque es increpado por sus vecinos. Alega su no asistencia a que está en la reconstrucción, que no se cómo se hará. Este Gobierno, que niega el cambio climático y que ha sido la causa principal del desastre, volverá a construir en barrancos y cauces de los ríos.

¿Cómo puede continuar en su cargo una persona rechazada por su propio pueblo? Hay que valer para eso, la verdad.