No sé cómo debería haber asimilado la muerte de mis abuelos. Porque ya han pasado cinco años, tengo 16 años y sigo afrontando ese duelo. ¿Podría haber aprovechado mejor el tiempo que compartí con ellos? Me preguntaba si podríamos haber hablado más tiempo juntos y cómo debería haberme mostrado en sus funerales.
Pensaba que el auténtico duelo era mostrar mi pena a los demás, llorar en los funerales y estar triste de inmediato. No es así, cuando era niño no era realmente consciente de que morirían, ni de que mi relación con ellos se quedaría solamente en lo que compartí con ellos y los momentos que no aproveché se convertirían en una culpa que me atascaría en mi proceso de duelo. Pero, ahora entiendo que la muerte es una parte de nuestra vida tan natural como nacer y hay muchas formas de asimilarlo.
Un niño aún no entiende la muerte y no es capaz de saber el tiempo que tiene con aquellas personas. Por eso, espero que cualquier persona pasando por un proceso de duelo similar logre entender que no hay manera correcta de haber pasado el duelo ni de haber hecho las cosas mejor, porque un niño no tiene culpa de ello.