Que no se nos atraganten las lenguas

LOS cerebros de los niños y niñas no son móviles con un número limitado de megas para descarga de contenidos. Los humanos, afortunadamente, no funcionamos así y eso es lo que nos permite, por ejemplo, aprender más de una lengua sin que nos pete el disco duro. Esto, que puede parecer una obviedad, no lo debe de ser para algunos que todavía insisten en que a la hora de elegir el modelo de enseñanza de niños y niñas hay que decantarse entre el euskera o el inglés.

El 1 de febrero se abrirá el plazo de prematriculación para los pequeños que comiencen su andadura escolar el curso que viene y, a cuenta de ello, varias entidades locales de Navarra han presentado una campaña para invitar a las familias a optar por el modelo D, esto es, la educación en euskera. Los mensajes fueron, ante todo, tranquilizadores.

A la pregunta del millón, esto es, qué nivel tendrán los chicos y chicas en los diferentes idiomas cuando lleguen a los 18 años, Roberto Pérez Elorza, técnico del departamento de Educación del Gobierno de Navarra, explicó que no hay que tener miedo. Afirmó que el nivel de castellano va a ser similar en los tres modelos, ya que se trata del lenguaje que está garantizado por el entorno. Según los niveles europeos que ahora se utilizan para la certificación de idiomas, todos estarían entre un B2 y un C1. Es el nivel en el que habitualmente se encuentra en su propia lengua una persona que no ha accedido a estudios universitarios. Dijo también que ese mismo nivel consigue el modelo D en euskera y que, en lo que se refiere al inglés, y teniendo en cuenta los datos que tienen actualmente, la gran mayoría del alumnado de los tres modelos llega al nivel B2 y los que mejor han funcionado o más interés han tenido llegan al B1 e incluso unos pocos llegan un poco más allá. Terminó su intervención con estas palabras: "Con el modelo D estamos asegurando buenos niveles en euskera y castellano, y un buen nivel en inglés, que además está subiendo y subirá más los próximos años".