Hoy es el 1 de Mayo más silencioso de la Historia. No hay megáfonos, bocinas ni silbatos. Ni lemas coreados puño en alto con más o menos convicción ni ríos humanos inundando cauces de asfalto y empujando pancartas. Así que pensaremos desde casa, no ya a las ocho, sino en muchos momentos y como cada día, en todas las trabajadoras y trabajadores que estáis en primera línea facilitándonos esta existencia recortada y contenida. Y que lo hacéis con salarios insuficientes y condiciones precarias. Y en los que no sabéis si os va a compensar reabrir tienda, bar y peluquería aplicando el 30% de aforo. Y en los que estáis en paro calentando inquietud y banquillo. Hace unos días el Borussia Dortmund, un club alemán para quienes no sabemos nada de fútbol, y un club mítico para los que sí, tuvo una de esas ideas que los empresarios denominan win-win y los que no lo somos, solo buena idea porque las dos partes ganan. A los empleados de sus tiendas de merchandising para aficionados y del centro de entrenamiento que se habían quedado en paro estas semanas los ha recolocado como cajeros y reponedoras en los supermercados de la cadena Rewe, una de sus socias. Cuando reabran volverán a sus puestos. Entretanto, tienen contrato y sueldo y los súper, el personal extra que necesitaban estos días de sobreavituallamiento. Estamos comiendo por encima de nuestras necesidades, amigos, y lo sabemos. Y en un intento falaz por compensar nos hemos lanzado como locos a la web de Decathlon y hemos arrasado con bandas elásticas, agarraderas para hacer flexiones y esas barras que se colocan en el marco de la puerta y, si no te matas, te cuelgas. Estos eran los top ventas hasta que supimos que mañana se abre la veda del deporte exterior individual. En tres días se han multiplicado las ventas de zapatillas para "marcha deportiva", esto es, para andar. ¿Podríamos salir con las de casa? Perfectamente. ¿Nos parece excesivo? También. Como canta el épico y maravilloso himno del Liverpool, coreado también por la afición del Borussia, you ll never walk alone. Mañana, mucho menos. ¿Sabremos disfrutar del aire libre sin perder la cabeza? ¡A por ello!