a Policía Municipal de Pamplona desalojó este jueves un local de hostelería en el barrio de Iturrama en el que 50 jóvenes se encontraban bailando y bebiendo en la pista de baile sin respetar la normativa sanitaria". Nada nuevo, sólo otra violación de alguna de las normas que se han dictado durante esta larga pandemia y que deja bien a las claras el momento en el que vivimos, entre la desgana y el hastío. Ya es hora de que las autoridades admitan en voz alta -saber, lo saben de sobra- que cada día más y más gente se pasa los preceptos por el forro. Los adultos y los chavales, todos o casi todos, estamos más que hartos, en tanto que ha llegado el buen tiempo y aterra imaginar un verano siquiera semejante al pasado, llevamos demasiados meses aislados unos de otros, la vacunación va bien... Sea por la razón que sea, seguro que por varias, basta pasearse por barrios y pueblos y ver al personal encantado de encontrarse en grupos, no siempre enmascarado, algunos lata en mano y achicando por minutos la, hasta hace nada, sacrosanta distancia de seguridad. Señores gobernantes de aquí y allá o mandan a todas sus policías con la receta a organizarnos de nuevo -que no parece conveniente ni efectivo- o le dan una vuelta a este tiempo en el que estamos demasiado cansados para chorradas.