El bertso lanzado al aire de la plaza Consistorial el pasado martes por Jagoba Arrasate en el homenaje de la ciudad a Osasuna puso la guinda a una jornada en la que el euskera estuvo más presente que nunca en los actos públicos vinculados con el club. Podría afirmarse que desde el día que los fundadores acordaron el nombre del equipo (1920), la lengua vasca no había disfrutado de tanto protagonismo en la entidad y de cara al exterior. La condición de euskaldun del capitán, Oier Sanjurjo, así como del entrenador y parte del cuerpo técnico, ha normalizado su uso estos días tanto en discursos oficiales como en los encuentros con la afición.

El pasado mes de octubre, Osasuna firmó con AEK un acuerdo para desarrollar “charlas de motivación y sensibilización, clases de euskera a los empleados y jugadores y un plan de traducciones”. No hace falta recordar que la noticia abrió las carnes de la derecha más reaccionaria -en particular del PPN-, que acusó a la actual directiva de entregarse en brazos del nacionalismo, lo que además de ser una falsedad supone un desconocimiento total del perfil de los actuales rectores. Sin olvidar que desde que Javier Miranda llegara a la presidencia en 1998, las juntas posteriores siempre han dado pasos para, con más o menos énfasis, hacer visible el euskera en la entidad.

El artículo 5º de los Estatutos del club recoge que “las lenguas propias de Osasuna son el castellano y el euskera”. El club se ha aplicado a ello en todas sus comunicaciones y en las redes sociales. Pero pocos futbolistas lo han entendido mejor que el delantero mallorquín Brandon Thomas, quien en la medianoche del lunes tomó el micrófono y se dirigió en lengua vasca a los congregados en la Plaza del Castillo. El hecho fue resaltado por diferentes medios de comunicación de Palma al día siguiente. Brandon asistió a las clases de AEK junto a otros compañeros, como el valenciano Rubén García. Dos víctimas del voraz nacionalismo, dirán algunos. Se equivocan: son dos rojillos que en pocos meses han entendido mejor que unos políticos oportunistas lo que es Osasuna y lo que supone como elemento cohesionador de esta tierra.