Según el último estudio de la oficina europea de estadística, Eurostat, España ocupa la primera posición en el ranking de maternidad tardía. El 8,8% de los nacimientos en España durante 2017 fueron ya de madres con 40 años o más. La reacción popular más habitual nos llevaría a buscar las causas en asuntos como la precariedad laboral y la situación económica, que retrasan a su vez la emancipación de los jóvenes. Pero lo cierto es que no siempre ha ocurrido así, y de esas mismas causas no se han derivado necesariamente estas consecuencias.