or flema británica siempre hemos entendido ese carácter que abunda entre los habitantes del Reino Unido, muchos de los cuales afrontan las dificultades con una combinación de estoicismo, serenidad y un singular sentido del humor. Y solo desde esta peculiar mezcla puede comprenderse la decisión del Gobierno de Boris Johnson de seguir adelante con el calendario previsto para eliminar las restricciones impuestas por la lucha contra la covid, pese a que la pandemia, que tiene confinado al propio primer ministro, sigue desbocada con cerca de 50.000 contagios diarios.

Una situación que no tiene ninguna pinta de mejorar, de acuerdo con las previsiones que maneja el equipo científico que asesora al inquilino del número 10 de Downing Street, pero que ha llevado a los británicos a llenar los pubs y a salir en masa de vacaciones. Algunos expertos temen que la cifra de positivos por covid se dispare hasta los 200.000 al día. No obstante, esperan que, con más del 68% de la población adulta vacunada y una sobredosis de flema británica, se podrá contener la presión hospitalaria, y tanto las enfermedades graves ocasionadas por el virus como los fallecimientos estarán en niveles mínimos.