con siete años fui alumno hasta los 13, de EGB externo, del colegio Salesianos de Pamplona/Iruña. Recuerdo a curas, les llamábamos por? Don Alejandro, Hermógenes, Jesús Remón, Cándido, José Cuzcó, Esteban Arrieta, Domingo, Manuel Iborra El Topi y Pablo Baraut, director del citado centro. Y a los legos, -maestros que no cantaban misa- López, Colomer y Tardío.

En un principio, los enseñantes curas eran para nosotros unos maestros serios, lo hacían bien, ejemplo de buenos educadores. Nuestra opinión de niños empezó a cambiar cuando veíamos por los pasillos a madres/padres, junto al mencionado director. Comentábamos entre nosotros que alguna movida habría ocurrido.

Algún compañero nos decía, ¿será por los sobeos del cura conocido en el colegio, porque se acercaba mucho tras las cortinillas de su confesionario? Nosotros, sabedores de aquellas prácticas, acudimos -en contadas ocasiones- por los laterales, nos protegían las celosías.

Me desvinculé del citado colegio a los 13 años. Tras recibir estudios profesionales en la Escuela Profesional Virgen del Camino de la Txantrea, con 17 años, trabajé en la empresa industrial, apoyado con conocimientos en las escuelas nocturnas del colegio Salesianos. En los años 90, realicé cursillos de empresa en ese mismo centro.

Numerosos alumnos internos Salesianos se formaron en Estudios de Maestría Industrial, forjándose su futuro creando empresas y puestos de trabajo en Navarra/Nafarroa. Esas fueron las luces.

Desperté en el mundo real a los 24 años, -eran aquellos años llamados “de la primera madurez”-, decidiendo no practicar las enseñanzas religiosas que impartieron y que me quedaron adheridas en aquel mencionado colegio.

Año 2019. Medios informativos dan a conocer varios colegios de nuestra provincia donde algunos alumnos fueron víctimas de abusos sexuales. Son los siguientes: colegio Padres Reparadores de Puente la Reina, colegio Diocesano El Puy de Estella, Maristas, Jesuitas y Salesianos.

En estos meses pasados, esta última congregación citada figura en la lista negra sobre abusos sexuales. Iñaki (nombre ficticio) alumno en 1968, ha sido el primero en denunciar al salesiano Manuel Iborra El Topi. Pablo (n.f.), alumno entre 1953 y 1963, ha sido el segundo. Después de? Yo no aseguraré que no habrá más denuncias.

Tras estas informaciones mi cabreo ha sido considerable. Proveníamos de familias obreras, dignas, hijas/os del racionamiento, subsistiendo en aquella dura dictadura franquista, aquellas madres/padres querían para nosotros/as una educación correcta y respetuosa. Algunos alumnos del citado colegio, se encontraron con más penalidades.

En aquél colegio hubo algún cura que se escondía cobardemente en la congregación, --bendecida por la Iglesia Católica- actuando como monstruos, humillando y aterrorizando con maldad, sin escrúpulos, a niños inocentes, produciéndoles graves traumas. Recordar que vivimos años con riesgo muy cercano, impacta. Y estas fueron las oscuras sombras.

Con fecha 29/6/19 la prensa escribía: “El viejo edificio de Salesianos con el curso ya finalizado se está vaciando, estrenará centro en Sarriguren en septiembre”. Mi lastimada sensación: “Una vez demolido el colegio ya no existirá, pero quedará en nuestra mente”.

También las religiosas han sufrido abusos sexuales por sacerdotes. Luisa Berzosa, religiosa jesuitina, la primera mujer en el Sínodo de los Obispos, a denunciado la vulnerabilidad que sufren y añade que “en la Iglesia hay abusos a religiosas y mucho dolor”. El colegio Ursulinas de Pamplona/Iruña es otro centro donde se cometieron abusos. Asun, Sagrario y otra tercera hermana que no ha querido hablar han denunciado que “en los años 60, en el colegio de monjas, había abusos a diario”.

Ante estos graves hechos, la Mesa y la Junta de Portavoces del Parlamento de Navarra/Nafarroa, acordó celebrar una sesión de trabajo con una representación de las víctimas, que han denunciado abusos sexuales a menores en centros educativos concertados religiosos. La iniciativa, fue presentada por Podemos-Orain Bai. Mikel Buil, candidato de Podemos, pidió una comisión de la verdad sobre los presuntos abusos sexuales de la Iglesia.

El máximo cargo en la tierra de la Iglesia, el Papa, en la cumbre del Vaticano argumenta “que ve necesario que los obispos rindan cuentas sobre los abusos sexuales y ofrece ocho pautas para erradicar esa monstruosidad, incluyendo más cuidado en las selecciones de los curas y un plan de prevención de los casos”.

Durante varias décadas, en varios colegios hoy ya conocidos, no eliminaron los abusos sexuales. Es urgentísimo que las medidas que implanten desde Roma erradiquen totalmente esa lacra, que destroza personas.

Desde ya tiene que haber el firme cambio resolutivo, de las palabras a los hechos, ¡no más abusos sexuales! Ante esta situación creada, es obligada la intervención de madres/padres de las alumnas/os, en las Asociaciones de madres/padres, de cada colegio o centro educativo con el perteneciente fin de vigilancia y cercano control, de los comportamientos de sus enseñantes en los colegios.

Que la actual situación temerosa, se trasforme ya, en tranquilizadora para las niñas/os, madres/padres, e incluso abuelas/os.