El miércoles 4 de septiembre nos invitaron, como público, a la reunión de la comisión parlamentaria en la que se presentaba la memoria 2023 de la comisión de reconocimiento de víctimas de pederastia en el seno de la Iglesia Católica en Navarra.

En esa misma sala, pronto hará cinco años, nos escucharon los parlamentarios los desgarradores testimonios de los abusos de pederastia recibidos, todos, repito todos, por parte de miembros de la Iglesia.

Aquello trajo como consecuencia la aprobación de la Ley de Reconocimiento de Víctimas en abril del 2022. Ahora se ha presentado el primer informe después de los trabajos en 2023.

A esta presentación solo asistimos como público los dos presidentes de las asociaciones de víctimas.

Por parte de la comisión tomaron la palabra su presidente Jose Antonio Echauri, el vicepresidente Mikel Córdoba y Ester Aldave. Explicaron su funcionamiento, composición y organización del trabajo en el reconocimiento de las solicitudes de investigación.

Hasta ahora se han presentado 62 solicitudes, 58 como víctimas y 4 como testigos. Estos no sufrieron abusos, pero los presenciaron, muchos eran realizados en las clases de los centros de enseñanza. Este informe se ocupa de los 16 expedientes finalizados.

Como primera valoración quisiera apuntar que seguramente parecen pocas las víctimas. Sitúense en los años 60 y 70 donde se produjeron más del 80% de las agresiones de este informe. Pleno nacional catolicismo.

Valoren que en el informe la edad de entre 6 y 12 años, la media de 9. El 75% fuimos abusados en colegios, el 19% en parroquias y un 5% en domicilio.

Todos los abusadores eran hombres, excepto una mujer, 11 éramos niños y 5 niñas. Nuestros victimarios tenían un gran poder sobre nosotros. Fueron 9 profesores, 3 párrocos, 2 cuidadores y dos enfermeros. Todos eran clérigos.

En una macabra, pero necesaria clasificación por la gravedad de los abusos, 4 fueron con penetración, 8 por tocamientos y masturbaciones y otros 4 leves, si así se pudiera calificar, que sean por encima de la ropa, frotamientos y proposiciones.

Doce de los abusados no se lo revelaron a nadie, ni a familia ni a profesores, 2 a su familia y dos a los responsables del centro.

El 50% de las víctimas han necesitado atención psicológica. ¿Saben la media de edad de nuestras denuncias? Sesenta y tres años. Miedo, puro miedo.

El 62% de los abusados hemos sido testigos de otros abusos. Se hacían en público. Tal era la impunidad de los clérigos pederastas. Pleno franquismo.

De las 16 personas objeto de este primer informe, 12 solo desean el reconocimiento de los hechos por parte de la Iglesia, tres que se les pida perdón, otros tres conocer y que se sepa el nombre de su victimario abusador. Solo dos reclaman indemnización económica.

Tras la presentación fueron tomando la palabra los representantes de los partidos políticos. UPN, por medio de Marta Álvarez, valoró como importante el trabajo, pero… siempre hay un pero. Dijeron que la Iglesia no debe ser culpada como institución, son las personas las responsables.

A ello se unió posteriormente el PP del Sr. García. Señores, ¿no han leído el título de la Ley? Termina en “cometidos en el ámbito de la Iglesia Católica”.

No hay que acusar a quien pide perdón sin reconocer lo sucedido mientras se niegan a colaborar.

Por último, desobedecen a su propio pontífice cuando les reclama abrir sus archivos y colaborar con la justicia ordinaria.

No hablemos ya de reparar, no. Lo harán cuando el Estado asuma lo mismo para todas las víctimas. ¿Es que tiene la misma responsabilidad en todos los espacios que la Iglesia en el suyo? Se atribuyen ser una referencia moral. Séanlo.

Esta institución ha ocultado, y lo sigue haciendo, los casos que conoce en su seno. Los episcopados españoles niegan o minimizan a cifras ridículas sus abusos de pederastia.

El Estado no oculta y menos este Gobierno con el que no simpatizan. La prueba es que han desarrollado la investigación del Defensor del Pueblo que demuestra la existencia en España de 440.000 personas abusadas en el seno de la Iglesia que lo niega.

El PSN, a través de Inma Jurío, destacó la doble victimización a la que nos han sometido y reconoció la necesidad de reconocimiento y reparación.

Por parte de EH Bildu, Arantxa Izurdiaga coincidía con Blanca Regúlez, de Geroa Bai, y con Miguel Garrido de Contigo Zurekin. Afirmaron que es necesaria la politización, “no como instrumentalización de los partidos políticos, sino como reconocimiento de una mala atención de las instituciones”.

No había representantes de VOX, son dos para muchos frentes, y este no parece ser el suyo. Mejor su ausencia.

No quisiera terminar sin reiterar el agradecimiento al Parlamento y a la Comisión de las víctimas. Siguen siendo precursores en la legislación de justicia restaurativa.

También dar la bienvenida a los dos miembros de la Iglesia en representación del Arzobispado, espero que traslade al mismo las sensaciones de sufrimiento de las víctimas. Esperemos que así sean reconocidas y reparadas.

Así pues, bienvenida sea la continuidad en la denuncia que realiza el Parlamento de Navarra. Como dijo Shakespeare, podremos ser “el asombro del mundo”.

*En representación de AVIPIREN, Asociación de Víctimas de Pederastia en Instituciones Religiosas de Navarra