El pasado año 2024, la Asociación de Jubilados Aroa de Burlada presentó una propuesta al Ayuntamiento para llevar a cabo de manera conjunta el Día del Árbol.
Ese día se plantaron 11 árboles proporcionados por el Ayuntamiento, con la participación entusiasta de padres, niños y jubilados, así como equipo de jardinería municipal. El evento culminó con fiesta popular, creando un ambiente festivo y comunitario. En años anteriores y con consistorios de diferentes sensibilidades, también se realizó en Burlada el Día del Árbol a propuesta vecinal.
Posteriormente consultamos al Ayuntamiento sobre la posibilidad de repetir el Día del Árbol en 2025, a lo que nos informaron que este año tenían planificadas otras actividades en los colegios. Suponiendo que el evento también se llevaría a cabo, nos ofrecimos a colaborar en la organización desde nuestra posición de jubilados.
A medida que se acercaba marzo, preguntamos al Ayuntamiento sobre la celebración del Día del Árbol en 2025. El 5 de marzo, recibimos un correo de un empleado municipal indicándonos que este año no se llevaría a cabo el evento por parte del Ayuntamiento.
Ante esta situación, el 14 de marzo presentamos un escrito en el Registro, informando al Ayuntamiento que, si no estaban dispuestos a organizar el Día del Árbol, nosotros como jubilados procederíamos a plantar 11 árboles financiados por nosotros, en un determinado espacio público. No recibimos respuesta. Antes de tomar esta decisión, consultamos a vecinos de la zona, quienes se comprometieron a regar los árboles durante el verano. Estos nos expresaron su preocupación, recordando que en años anteriores el Ayuntamiento había desmantelado varias plantaciones que ellos habían realizado, lo que refleja el sentimiento general sobre la necesidad de más arbolado en el pueblo.
Realizamos la primera mitad de las plantaciones el sábado 29 y nuestra sorpresa fue mayúscula al descubrir que el propio Ayuntamiento había arrancado los árboles sin previo aviso ni devolución. Al solicitar explicaciones, nos respondieron que “los árboles los tiene que poner el Consistorio y que no cualquier vecino”. Coincidimos en que la responsabilidad recae en el Ayuntamiento, pero resulta inaceptable que se actúe como el perro del hortelano, “que ni come ni deja comer”.
Burlada es una localidad que presenta evidente déficit de arbolado, probablemente heredado de legislaturas anteriores. Aunque se están realizando esfuerzos para mejorar la situación, existen numerosos alcorques vacíos en las calles que esperan ser repuestos. Lo que no comprendemos es por qué, habiendo espacios apropiados para reforestar no se colabora con el voluntariado, como han hecho municipios como Tudela, Estella, Olite, Cendea del Olza, Tafalla, Uharte, Mañeru, Biurrun, Sorauren, etcétera.
Somos conscientes de que Burlada enfrenta limitaciones económicas que dificultan la gestión y mantenimiento del excelente equipo de jardinería. Conociendo esta realidad, hemos propuesto ideas, como solicitar apoyo económico al Gobierno de Navarra para ampliar el arbolado y las zonas verdes con la colaboración vecinal.
Los ayuntamientos con inclinación progresista suelen destacar por su compromiso con la participación vecinal, tal como prometían en sus programas electorales. Sin embargo, en este caso, esa participación no se ha materializado en Burlada, lo que lamentamos profundamente.
El año 2024 ha batido récords históricos de temperaturas y se prevé que esta tendencia continúe en los próximos años. Esto impactará directamente a los vecinos. Por ello, conscientes de los desafíos que enfrentamos, solicitamos a las instituciones que amplíen el arbolado existente y que creen nuevas infraestructuras verdes. Estas acciones son fundamentales para hacer frente a la crisis climática y de biodiversidad que enfrentamos. Como colectivo vecinal, nos ofrecemos a colaborar en todas las iniciativas que proponga el Ayuntamiento de Burlada en esta dirección.
El autor es presidente de Aroa (Asociación de Jubilados de Burlada)