PAMPLONA- El director general del Nàstic, Lluís Fábregas, y el entrenador el conjunto tarraconense, Antonio Rodríguez Saravia, Rodri, fueron los encargados de dar la cara en representación del club catalán, pero sus versiones sobre lo sucedido resultaron diferentes. Mientras que Fábregas se escudó en la figura del árbitro para justificar la suspensión y negó que su equipo se negara a jugar hoy, Rodri sí que admitió que el Nàstic declinó la opción de que el encuentro se disputase esta tarde.
“Nosotros no hemos jugado porque el arbitro, que es la máxima autoridad, ha decidido que no se podía porque no se daban las condiciones mínimas de seguridad para los futbolistas”, explicó el director general del Nàstic ante los periodistas. “El club ha venido a jugar y el campo estaba bien por la tarde, pero una hora y media antes del comienzo ha empezado a nevar y estaba impracticable. Suponía un riesgo claro y el árbitro ha decidido que no se podía jugar. Nosotros no hemos declinado jugar mañana (por hoy) porque eso depende de la Liga, la Federación, los clubes y el operador televisivo y no se puede hacer con menos de 24 horas de antelación. Además, el Nàstic se tiene que ir y volverá a Pamplona cuando tenga que volver”, alegó Fábregas.
En cambio, el entrenador del Nàstic dijo algo diferente: “Veníamos con ganas de jugar, pero en el calentamiento hemos visto que había placas de hielo y creemos que es peligrosos para la integridad de los futbolista y el árbitro ha decidido que el campo no estaba en condiciones por el tema de las lesiones. Me fastidia que se diga que nos hemos negado a jugar porque tenemos muchos lesionados, ya que los jugadores que iban a tener una oportunidad se han quedado de momento sin ella. Osasuna ha planteado jugar mañana (por hoy), pero no podemos estar con esa incertidumbre de cuándo jugaremos y además teníamos previsto regresar a Tarragona después del partido”. - J.G.U.