PAMPLONA. Unai García Lugea (Esquíroz, 1992) se convirtió el pasado sábado en uno de los protagonistas del partido que disputó su equipo, Osasuna, contra el Oviedo. ¿El motivo? Que el central navarro adelantó al conjunto rojillo en el minuto 3, pero en el 62 niveló la contienda con un tanto en su propia portería los locales completaron su remontada con otra diana en el 90. Ocurrió todo en su encuentro número 99 con el primer equipo de Osasuna, por lo que el próximo domingo volverá a ser protagonista.

Y es que, si actúa en el Wanda Metropolitano de Madrid contra el Rayo Majadahonda, será su partido 100 con la elástica rojilla, hito que han alcanzado unos cuantos, pero sólo otros cuatro jugadores de la actual plantilla del conjunto navarro: Miguel Flaño (336), Oier (237), Roberto Torres (211) y David García (105). A falta de que se confirme su participación en el próximo compromiso liguero de Osasuna, todo apunta a que Unai García ingresará el domingo en el club de los 100, ya que el central rojillo ha disputado al completo los 10 primeros partidos de Liga que ha jugado su equipo en lo que va de curso y se ha erigido, además, en una referencia en el eje de la defensa del conjunto navarro.

Imprescindible para Jagoba Arrasate desde que el técnico vizcaíno aterrizara en Pamplona el pasado verano, el central de Esquíroz parece haber alcanzado su madurez como futbolista profesional, erigiéndose en un fijo en las alineaciones del entrenador de Osasuna junto a Oier y Clerc, los otros dos que los han disputado todo en Liga. Para situarse en el umbral de los 100 partidos defendiendo la elástica del primer equipo de Osasuna, Unai García no lo ha tenido fácil. El central navarro se estrenó de la mano de José Luis Mendilibar en la última jornada de la temporada 2012/2013 y lo hizo en un estadio emblemático, el Santiago Bernabéu, y contra un rival de postín, el Real Madrid. Disputó al completó un choque en el que ni unos ni otros se jugaban nada y que acabó con triunfo local (4-2).

Tras su debut, el futbolista de Esquíroz regresó a la disciplina del Promesas, con el que compitió en Tercera División durante todo el curso 2013/2014 antes de dar el salto al primer equipo en la campaña 2014/2015 de la mano de Jan Urban. Sin embargo, sólo disputó tres partidos (dos de Liga y uno de Copa) y en el mercado invernal aceptó salir cedido al Tudelano, de Segunda B. Su buen hacer en el conjunto ribero le permitió hacerse un hueco en el plantel profesional de Osasuna en la temporada 2015/2016. Y desde entonces, en Primera y Segunda, ha ido acumulando partidos y experiencia. Hasta contar casi hasta 100. Salvo contratiempo físico o sorpresa mayúscula, lo hará el domingo en el Wanda.