PAMPLONa - La Fiscalía deslizó ayer que el pacto alcanzado entre los exdirectivos de Osasuna y los jugadores del Betis no fue solo para primar a los verdiblancos para que ganaran al Valladolid en la penúltima jornada de Liga, sino que dicho acuerdo también contemplaba que se dejaran derrotar en Pamplona. Añadió que, por eso, aquello fructificó a través de dos jugadores lesionados, como Amaya y Torres, que tenían posibilidad de ausentarse de los entrenamientos. Así, la representante del Ministerio Fiscal expuso que se trató de un “pacto global” en el que en la reunión en Madrid en el hotel Los Galgos se pactó 1 millón de euros, a su juicio. Puso de relieve la fiscal que “parece más antideportivo pagar por dejarse perder (250.000 euros) que por primar por ganar al Valladolid (400.000). Por eso digo que es algo global, no son cantidades aisladas. Seguro que si Osasuna se mantiene, hubiera cumplido con los pagos pactados”.
