"A todas las leyes se les puede buscar una vuelta de tuerca, pero el problema está en interpretar esa ley para hacerla tuya. Ha habido un mal uso de la norma y me da mucha pena porque se pierde el espíritu de la norma y también el significado de una asamblea de socios compromisarios de un club deportivo". Así analiza Amaia Markotegi las maniobras de la junta de Sabalza en las recientes elecciones a compromisario. "Me parece fantástico que se organicen, como cualquiera lo puede hacer, pero se han cometido irregularidades, sobre todo con el voto por correo. La junta ha hecho un uso partidista de la información y todos los candidatos no hemos concurrido a las elecciones en igualdad de condiciones", argumenta.

Markotegi se explica: "Intenté enterarme de quiénes eran las personas de mi millar, los únicos que pueden votarme, pero este año ha habido una dificultad añadida porque ha habido un cambio de numeración de socios y la gente no tiene acceso a ese dato porque no tenemos carné físico. Además, agarrándose a la ley de protección de datos, ha habido mucha información que se nos ha capado, y no olvidemos que ha habido trabajadores, familiares de trabajadores y empresas vinculadas al club que tienen acceso a determinados datos muy importantes para poder manejar el proceso y a los que otros socios no lo hemos tenido".

No sabe si una posible judicialización de los comicios tendría recorrido porque carece de formación en esta materia, pero señala que "lo que sí es objetivo es que en los estatutos de Osasuna no consta la opción del voto por correo en las elecciones a compromisario".

De poder estar en la próxima asamblea, Markotegi dice que "no cambiaría mi discurso: lo único que pretendo es que se hagan las cosas bien dentro del club y para eso los socios tenemos que tener más información y más herramientas de control de las que tenemos hoy. Ha habido mejoras, muchas de ellas, por cierto, promovidas en gran medida por esta asamblea".