Osasuna continúa con su rebosante mejoría en esta temporada que empezó envuelta entre las dudas y en la que ahora ya ha sacado la cabeza de entre las brumas y le da el sol por fin en la cara. El equipo de Arrasate se dio ayer una fiesta en su estadio, ganó con autoridad al Valencia, llenó la mochila de la salvación porque 40 puntos es el botín, y mira hacia la zona en calma de la clasificación. Un escenario ideal que no se veía cuando se terminó el año pasado derrumbado en la penúltima posición, con más de veinte puntos menos que los que brillan ahora. Osasuna se ha quitado las cadenas, las de la presión de la clasificación, las de la angustia ante la ausencia de resultados, y va lanzado en este tramo final de la Liga, en donde acumula sus mejores registros de la temporada.

Ante un Valencia decepcionante, arrollado en la segunda mitad, Osasuna sumó su tercera victoria consecutiva, una racha excepcional, y demostró que está en otra onda, que le ha pillado el ritmo a la competición, que los futbolistas transitan a una velocidad que antes no tenían. De no haber mediado la actuación del portero del Valencia, el conjunto navarro hubiese firmado una goleada. De no generar ocasiones, de vivir en partidos grises y taciturnos, Osasuna ha pasado a una situación diametralmente opuesta y ayer vivió como en las grandes tardes de fútbol: galopando sin miedo en pos de la portería contraria, sembrando oportunidades, socavando el ánimo de su rival, gozando y creyendo.

Osasuna ha encontrado una motivación nueva para los seis encuentros de Liga que restan. Zanjada la cuestión de la permanencia cada vez con más holgura, el reto de seguir escalando en al escalafón, de aprovechar la motivación de este grupo extensísimo de futbolistas motivados, se presentan como algunas de las cuestiones para incidir en las próximas jornadas. En este punto, la atinada gestión de la plantilla, en la que Arrasate se empeña repartiendo oportunidades a casi todo el mundo, el partido de ayer le dio la razón. El técnico rojillo mantuvo a los cuatro defensas y al portero, refrescó de ahí hacia adelante hasta cinco futbolistas -Torró fue el único que se mantuvo de la última cita-, y no le pudo salir mejor. Tres de las cinco novedades para la cita se apuntaron a goleadores, qué más se puede pedir cuando se quiere estimular a un grupo, buscar alternativas y dar descanso ante la acumulación de partidos.

Osasuna entró en el partido por la puerta grande. El Valencia se decidió por jugar el balón desde su propio área, desde su cueva, un ejercicio que a la postre resultó suicida. Una torpe salida de la pelota, una lógica presión de los rojillos para recuperarla, propició un robo y una maniobra entre Calleri y Javi Martínez abrió todas las puertas para que canterano marcara el primer gol. El primero en Primera, el primero en El Sadar, toda una efeméride para un jugador que volvió a aprovechar su oportunidad. Después de empezar bien, sin embargo, le llegaron a Osasuna los minutos de los apuros. No fue por la excelencia en el juego de los hombres de Javi Gracia, sino por el fuste de Guedes. El portugués lanzó un trallazo que repelió el poste y a la media hora hizo saltar a la defensa rojilla con un pase excelente que Gameiro no desaprovechó. Los dos futbolistas de calidad del Valencia conectaron y las consecuencias de estos chispazos suelen ser fatales. Ni tiempo tuvieron para tomar aire tras la celebración porque en la jugada siguiente, tras saque de centro y recuperación de la pelota por parte valencianista, otro error en el juego de toques junto al área llevaron a otro error en la entrega, al intercambio de papeles, porque en esta ocasión, tras el fallo, fue Javi Martínez el asistente de Calleri, que volvió a poner en el partido por delante para Osasuna. Torró estuvo a punto de cerrar el encuentro muy cerca del descanso, tras un lanzamiento de Torres, pero el centrocampista se vio atropellado por el balón y lo mandó a las nubes.

El Valencia engañó a todo el mundo con un regreso tras el descanso más dinámico y menos aburrido. Guedes probó a Herrera y Gameiro fue el que se topó con el poste tras el rechace del meta rojillo en la acción más clara tras la reanudación. El oficio de Osasuna salió para contener estos escarceos y el partido fue cayendo poco a poco de su lado. Oier comenzó a que la actuación de Domenech fuese sobresaliente cuando lo probó en un disparo lejano con estirada excelente. Poco después, llegó el grueso asunto de los penaltis, toda una animación para un encuentro de por sí atractivo. El primero lo pitó el VAR por una mano clara y Roberto Torres rompió la tradición al fallarlo; más bien lo rechazó Domenech, que había parloteado con el jugador de Osasuna en los instantes previos al lanzamiento y que debió sentirse reconfortado al salir ganador de la guerra de nervios. En la jugada siguiente, la del córner por el despeje del meta, Wass y Diakhaby se lanzaron al despeje con los codos de escudo y al árbitro se lo pusieron muy fácil para ir otra vez al punto de los once metros. Domenech quiso incidir en el conjuro, pero Torró interfirió en la conversación previa colándose delante de Roberto Torres, que colocaba de nuevo el balón para lanzarlo pese al error anterior. El centrocampista no tembló, repitió la trayectoria del disparo a la portería, pero su latigazo fue mejor, más esquinado. El tercer gol de Osasuna terminó literalmente el partido. El Valencia hizo algunos cambios que quisieron empujar una reacción, y Arrasate hizo los suyos que, por contra, siguieron sumando ocasiones claras para marcar, como las que tuvieron Budimir y Darko. Es que Osasuna rozó la goleada, porque parece que anda sobrado, en otra onda.

- Ficha técnica

3 â Osasuna: Sergio Herrera; Nacho Vidal, Aridane, David García, Manu Sánchez; Torró; Roberto Torres (Budimir, m. 78), Oier (Moncayola, m. 62), Javi Martínez (Darko, m. 74), Adrián (Rubén García, m. 62); Calleri (Chimy Ávila, m.78).

1 â Valencia: Jaume; Molina (Jason, m. 80), Diakhaby, Gabriel, Gayá; Musah (Kang-In, m. 52), Wass, Racic (Oliva, m. 52), Cheryshev (Cutrone, m. 69); Guedes, Gameiro (Manu Vallejo, m. 80).

Goles: 1-0 Javi Martínez (m. 13), 1-1 Gameiro (m. 30), 2-1 Calleri (m. 32), 3-1 Torres, de penalti (m. 68).

Árbitro: Mario Melero López (Comité andaluz). Mostró tarjeta amarilla a Oier por parte de Osasuna y a Guedes y Diakhaby, del Valencia.

Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima primera jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio El Sadar a puerta cerrada. Los jugadores de ambos equipos salieron al terreno de juego con una camiseta con el lema 'Earn It.The football is for the fans (Gánatelo, el fútbol es para los aficionados).