Kike García no pudo terminar el partido de ayer tras lastimarse su tobillo derecho en una acción con Pedraza, jugador del Villarreal, en la que, paradójicamente, el árbitro señaló una falta del delantero de Osasuna. Ocurrió en una presión del conjunto navarro en la salida de balón de su adversario y acabó con el atacante conquense tirado en el suelo con ostensibles gestos de dolor, como demuestra la imagen. Aunque habrá que esperar a las pruebas que le realicen en los próximos días para conocer el alcance exacto de la lesión, lo cierto es que Parejo, futbolista del Villarreal, y el Andrés Fernández, médico de Osasuna, no tardaron en pedir el cambio en cuanto se acercaron a Kike García.