Como si de una predicción de la Bruja Lola se tratase, esta semana se ha viralizado por toda la faz de internet un vídeo de hace unos años en el que unos niños de África gritaban “Osasuna nunca se rinde”. Así andaban todos los adolescentes de norte y sur, ya fuesen rojillos o no. Cosas de la red. Eso sí, como alguno fuese del Madrid, a lo mejor se acordó del lema, aunque con un poquito de rabia. 

En las redes muchas veces se pierde el sentido del ridículo, pero cuando se juega contra el Madrid, no hay que irse a internet para encontrarse gente con una cara como el cemento.Así, mientas Osasuna y los suyos mascullaban que el gol de Vinicius era bastante ilegal, los rojillos se encontraron con la afamada opinión de Pérez Burrull. Sí, sí, el ínclito aquel de “por lo menos tirate bien, Juanfran”, después de guindarle dos penaltis claros. Pues oye, que semejante protagonista de ese esperpento da su opinión en medios nacionales como si de cátedra se tratase. Bueno, pues como entonces, se volvió a equivocar. Él y, lo peor, el árbitro y sus compañeros del VAR. La película de siempre, oiga, que tampoco sorprende. 

Pero este Osasuna anda con una dinámica que ni parones internacionales ni atracos ni nada. Los rojillos siguieron y tras el descanso, Unai, que ya se había animado a romper líneas varias veces, sacó ese guante que tiene y puso un centro medido para que Kike cabecease de espaldas a la misma escuadra. Hay delanteros que saben dónde están siempre. Kike es uno de ellos. 

Aún pudo Osasuna, antes y después del gol, marcar alguno más. Pero Benzema apareció y David no tuvo más remedio que empujarlo. Penalti. Lo del triple castigo parecía que se había quitado por lo que no debió ser roja (vean lo de Djené en esta misma jornada), pero es que se jugaba en el Bernabéu. Roja para David. 

Eso sí, su acción permitió ver a Benzema contra su peor pesadilla. Sergio Herrera le tiene tan comida la cabeza que el francés mandó el balón al larguero. A partir de ahí, a sufrir como campeones. 

Y Osasuna sumó otro empate rico para seguir acrecentando la sensación de que apetece y mucho ver a este equipo. Y si alguien no vive en este mundo y no se había enterado en internet, pues ya lo saben: Osasuna nunca se rinde.