Seguir en la Copa dispara a siete los partidos de Osasuna en enero

Jagoba Arrasate conversa con Manu Sánchez en el entrenamiento del martes. Oskar Montero

El Mundial ha cumplido con su parón en los campeonatos y torneos y ya se inició con la disputa de una jornada el último día del año la recuperación del ritmo y partidos, cosa que en otras ligas ya ha comenzado incluso con más intensidad. 2023 comienza con un calendario de Liga exigente al que está en condiciones de echar más leña si en la Copa se avanza y se cumplen los objetivos en el torneo. La competición de locura en enero se inicia mañana con la Copa en Tarragona contra el Nástic –equipo de Primera RFEF– y sigue con la Liga también fuera de casa en San Mamés. Los rojillos vienen de perder sus dos últimos partidos, en casa con el Barcelona antes del descanso mundialista y el sábado en Donosti frente a la Real, por lo que es innegable la necesidad de alguna reacción para mantener el nivel de la Liga. El calendario tiene programado el primer encuentro en El Sadar contra el Mallorca el 14 de enero (18.30).

Continuar en la Copa supone que habrá partido entre semana para la disputa de los octavos de final –del 17 al 19 de enero en el formato a un solo encuentro en el campo del equipo de menor categoría o del que salga primero en el sorteo si los rivales son de la misma–, antes de viajar a Elche para seguir con la Liga, que lógicamente no para.

Seguir en la pelea y llegar a los cuartos de final significará otro compromiso entre semana –del 24 al 26 de enero– antes de jugar el ultimo encuentro de la primera vuelta en casa ante el Atlético de Madrid, el último fin de semana de este primer mes sin tregua. Es decir, un enero con el paso de las eliminatorias de Copa como premio supone un mes con siete encuentros oficiales.