Hace unos cuantos años había un grupo de música compuesto por navarros que estaba muy de moda. Se llamaban Dikers y estuvieron sonando entre la juventud foral bastante. Ahora, en 2023, tiene pinta que los que se van a poner de moda son los ‘Ikers’ de Osasuna tras su verdadero estreno en Primera.

Ya venía Jagoba dándoles minutos hace unas semanas, pero en Cádiz es donde les dio la titularidad aprovechando la cómoda situación rojilla y que hay que dar refresco a los que tienen que saltar al campo el seis de mayo. 

Y nos es que ambos cumplieran, es que ambos firmaron un partido más que notable, casi impropio de unos novatos. De Iker Muñoz llevan tiempo hablando en Tajonar por su sobriedad y su facilidad para jugar la pelota. Teniendo en cuenta que Osasuna no tiene sustituto natural para Torró, la figura del de Villafranca está llamada a consolidarse en el primer equipo más pronto que tarde. Y como juegue así, será complicado volverle a ver en el Promesas por un tiempo. 

Y luego está Iker Benito. Es fácil recordar cuando en 2018 se incorporó a Tajonar procedente del Pamplona, vinculado del Athletic. Aquella fue de las primeras operaciones de Ángel Alcalde para tener a los mejores talentos navarros en la cantera rojilla. Cuando llegó a Osasuna, el chaval ya venía con un talento de base bastante importante, pero es de destacar el crecimiento físico y, sobre todo, mental que ha ido desarrollando durante su estancia en Tajonar, especialmente en el Promesas. Tiene aún su camino por recorrer. Una pena que se quedase a unos centímetros de rebañarle a Ledesma el balón y haberse ido con un golito. Poco a poco, pero está claro que hay que poner en valor la figura de Ángel Alcalde. Desde su llegada a Tajonar, en la sombra, ha habido un crecimiento exponencial en la cantera rojilla.

Ya se encargó Rubén de rematar el buen y sobrio trabajo rojillo, sabiendo alargar el partido y jugar con la ansiedad local por sumar. Luego llegó el punto negativo, que fue la tonta expulsión de Abde al poco de haber entrado. Es conocido que uno de los puntos a trabajar por parte del extremo es ese control de las emociones. Lo hará, pero tampoco le vendrá mal algo malo tras tanto halago (especialmente desmedido todo lo llegado desde Barcelona, seguramente intentando subir el precio de una posible venta).