Osasuna, como club, preparó ayer un homenaje para la golfista navarra Carlota Ciganda por su triunfo en la Solheim Cup con Europa, mientras que la afición del conjunto navarro se inventó otro en forma de aplausos para César Azpilicueta en el retorno del zizurtarra a El Sadar 13 años después.

Bastante antes del comienzo del partido, el presidente de Osasuna, Luis Sabalza, ejerció de anfitrión en el tributo del club rojillo a Carlota Ciganda para reconocer a la golfista de Ultzama su excelente actuación del pasado domingo en la Solheim Cup, el desafío que enfrenta a las mejores de Europa y Estados Unidos, contribuyendo de manera decisiva al triunfo de las representantes del Viejo Continente. El máximo mandatario le guio por el estadio para después entregarle como obsequio una camiseta de Osasuna.

Habló Carlota Ciganda, sobrina de José Ángel Cuco Ziganda, el que fuera jugador y entrenador del conjunto navarro, delante del micrófono de DAZN, ante el que reconoció su felicidad. “Estoy muy contenta de estar aquí. Es un orgullo estar en casa, en Pamplona, en El Sadar y que me hagan esto”, dijo, añadiendo que “ha sido una semana inolvidable, con toda mi familia viendo, y lo guardaré siempre en el corazón”. Además, reconoció que “paso más nervios en el campo de golf que en actos como este” y finalizó elogiando el césped de El Sadar: “La hierba es espectacular, no me importaría dar algún golpe”.

500 partidos en las grandes ligas

Pero no fue el único tributo de la noche. Y es que César Azpilicueta, futbolista formado en Tajonar, regresó a El Sadar 13 años después de su salida de Osasuna. Se llevó la ovación de la grada cuando sonó su nombre por megafonía anunciando su presencia en el banquillo y cuando saltó al terreno de juego en el minuto 61. Además, fue su partido 500 en las grandes ligas europeas: 349 con el Chelsea, 99 con Osasuna, 47 con el Olympique de Marsella y 5 con el Atlético, según datos facilitados por OPTA.