Tras disputar sus dos últimos compromisos oficiales a domicilio –en el Ramón Sánchez Pizjuán contra el Sevilla (1-1) hace una semana y en Montjuic contra el Barcelona (1-0) el pasado miércoles en un partido aplazado–, Osasuna vuelve a El Sadar, escenario en el que ha encadenado tres triunfos ligueros consecutivos (1-0 al Rayo Vallecano, 1-0 al Almería y 3-2 al Getafe) y en el que esta tarde a partir de las 16.15 horas busca el cuarto contra el Celta.
Con la única baja del sancionado Unai García, al que expulsaron el pasado miércoles por doble amarilla, y ya sin los traspasados Darko (al Leganés) y Chimy Ávila (al Betis) ni el cedido Nacho Vidal (al Mallorca), el conjunto navarro aspira a prolongar su buena racha como local para, además, poner aún más distancia de por medio con los puestos de descenso y poder mirar con más descaro hacia la parte alta de la clasificación. Y es que los rojillos están ahora igual de lejos del descenso que de la sexta plaza, la última que a priori clasifica para una competición europea. Es decir, a 10 puntos de una cosa y de la otra.
Para buscar esa cuarta victoria consecutiva en casa, Arrasate anunció ayer que habrá rotaciones en el once inicial de Osasuna, que se presume bien diferente al que presentó hace cuatro días en Montjuic contra el Barcelona. No se espera cambio de sistema, pues esa organización con tres centrales, dos carrileros, tres centrocampistas y dos atacantes (obviando que siempre se juega con portero) ha llegado al conjunto navarro para quedarse, pero sí que habrá variaciones de nombres, pues el técnico avisó de que quiere piernas frescas.
Va a tener enfrente Osasuna a un equipo que no atraviesa por su mejor momento. Y es que el Celta va a llegar a Pamplona sólo un punto por encima de la zona de descenso, pero como al Cádiz se le ocurra ganar el partido que hoy a las 14.00 horas disputa en La Cerámica contra el Villarreal, el conjunto gallego saltará al césped de El Sadar en posición de descenso, con la presión que eso conlleva.
Al contrario que Osasuna, el Celta se ha reforzado en el mercado de invierno y en su convocatoria para viajar hasta la capital navarra quedó ayer incluido el extremo argentino Tadeo Allende, fichado esta misma semana por la entidad gallega de Godoy Cruz a cambio de cuatro millones y medio de euros, más o menos el dinero fijo que va a ingresar el club navarro por la venta del Chimy Ávila al Betis.
El partido de esta tarde también va a servir para que dos exrojillos regresen a Pamplona. De la experiencia de Rafa Benítez en el banquillo de Osasuna han pasado ya unos cuantos años –duró 11 partidos en la temporada 1996-1997, con los rojillos en Segunda División–, mientras que más reciente y fructífera se puede catalogar la etapa de Manu Sánchez, que encadenó tres cesiones consecutivas al cuadro navarro procedente del Atlético de Madrid, que este pasado verano incluyó al lateral en la operación para hacerse con los servicios de Javi Galán, ahora a préstamo en la Real Sociedad. Las vueltas que da la vida.
El Post-it
11 minutos sin Indar Gorri: Los miembros de Indar Gorri no ocuparán sus asisentos en El Sadar durante los primeros 11 minutos de los partidos contra Celta y Cádiz como protesta por la prohibición de acceder al estadio a 11 de sus integrantes por taponar las vías de evacuación. Jagoba Arrasate hizo referencia a esta protesta en sala de prensa cuando eran siete los sancionados.
