La plantilla de Osasuna se ha entrenado esta mañana en Tajonar con una numerosa presencia de aficionados en las gradas. El club cambió la ubicación de la sesión de trabajo, en principio prevista para El Sadar, para preservar el césped del estadio tras las últimas trombas de agua. Los hinchas rojillos tomaron buena nota del cambio de situación y han estado animando a los jugadores y esperando a que terminaran el entrenamiento para hacerse fotos y lograr autógrafos.
Vicente Moreno persevera en su perfil meticuloso e insistente y ha organizado una larga sesión de entrenamiento, a la que tras una parte de acondicionamiento físico ha seguido una intensa sesión de trabajo táctico. Arnaiz ha participado en la primera parte del entrenamiento pero no ha disputado los partidillos finales. Algunos jugadores, como siempre entre ellos Ante Budimir, han estado realizando lanzamientos a puerta al final del trabajo grupal.
La sesión de entrenamiento de este jueves, salvo cambio motivado por la metereología, está prevista que se desarrolle en El Sadar a puerta cerrada. El viernes, día de la convocatoria, los jugadores volverán a Tajonar a entrenarse de nuevo a puerta abierta.