Cada día que pasa el futuro de Pablo Ibáñez en Osasuna se complica más. El jugador tiene ofertas de Primera división, además de la de Osasuna, que sigue encima de la mesa aunque no se ha movido desde hace meses. El canterano prioriza seguir en el club rojillo aunque las posturas siguen estando alejadas.
Pablo Ibáñez acaba contrato este verano. El centrocampista, quien ya prolongo el pasado verano su vinculación al cumplir el número de partidos que marcaba su contrato para estar un año más, tiene tres ofertas de Primera además de la de Osasuna. Una que ha trascendido, como informó Relevo, es la del Alavés. Los vitorianos han apostado fuerte en su oferta por el navarro, aunque todo depende de la salvación de los babazorros.
Otros dos equipos de Primera también han lanzado ofertas al canterano. Hay quien apunta que uno es el Espanyol, pero lo único que está claro es que Ibáñez no tiene una decisión tomada ya que quiere apurar al máximo para saber si Osasuna hace un último movimiento ya que su prioridad es quedarse en el club rojillo, siempre que se acerquen posturas.
Alejados
Lo cierto es que ahora mismo ambas partes están muy alejadas. Braulio habló de ello el domingo. “Acaba contrato. Nosotros ya hicimos tres ofertas de renovación y sus agentes consideraron que no eran adecuadas o no las consideraron oportunas. Acaba contrato y es libre de escoger ir al equipo que él estime; y nosotros, también de planificar”.
Y es que desde el club han confirmado a este periódico que no tienen intención a día de hoy de elevar la propuesta de renovación que le ofrecieron en su día y que declinaron tanto el futbolista como la agencia de representación.
Habrá que esperar a ver si se desbloquean las negociaciones, pero ahora mismo Pablo parece cada vez más lejos de Osasuna.
