Rojos sin roja

Consumidas ya 33 jornadas de Liga, Osasuna comparte con el Espanyol un récord de juego limpio, ya que son los dos únicos equipos de Primera División cuyos jugadores no han visto tarjeta roja alguna. O mejor dicho, cuyos jugadores no han sido expulsados en ningún partido, pues a Pablo Ibáñez sí que le enseñaron el pasado jueves una cartulina roja que luego el árbitro Cordero Vega convirtió en amarilla tras revisar en el monitor, a instancias del responsable del VAR, Muñiz Ruiz, la entrada del futbolista del conjunto navarro sobre el jugador suizo del Sevilla Djibril Sow.

El Espanyol también estuvo en un tris de perder esa condición de equipo sin rojas en su duelo contra el Real Madrid del pasado 1 de febrero, cuando a Carlos Romero le perdonaron la expulsión por una terrible entrada a Kylian Mbappé 23 minutos antes de marcar el gol de la victoria del conjunto catalán.

La cuestión es que tanto Osasuna como Espanyol no han tenido expulsiones en lo que va de Liga, mientras que en el otro extremo de esta curiosa clasificación aparecen el Mallorca y el Sevilla, con seis rojas cada equipo (a Lukébakio, del conjunto hispalense, le expulsaron el pasado jueves en Pamplona), líderes a los que persigue un pelotón de cinco equipos con cinco cartulinas rojas cada uno: Alavés, Celta, Getafe, Leganés y Valladolid. Los rojos no han visto rojas hasta la fecha y les quedan cinco jornadas por delante para mantener esta inmaculada estadística, como al Espanyol.