‘Pon una papelera en tu baño’, campaña para no tirar toallitas al WC y evitar atascos
En 2015 se tuvieron que limpiar, por acumulación de residuos, 201 kilómetros de colectores
pamploNa - La Mancomunidad de la Comarca de Pamplona presentó ayer la nueva campaña de comunicación, realizada en colaboración con Nilsa, centrada en el uso adecuado de las toallitas higiénicas. Hay desechos con los que la red de saneamiento de agua no puede trabajar directamente. Concretamente, las toallitas húmedas desechadas por el WC no se descomponen totalmente y terminan ocasionando atascos y problemas que conllevan importantes consecuencias económicas y ambientales. La campaña presentada ayer se centra en esta amenaza para los sistemas de saneamiento y depuración. La campaña Pon una papelera en tu baño propone como mejor alternativa la colocación de una papelera en el baño y depositar en ella las toallitas junto con el resto de residuos. El contenido final debe ir al contenedor de la fracción resto. La utilización de la papelera evitará atascos y problemas en el tratamiento de aguas residuales y supondrá un importante ahorro económico, subrayan. Asimismo, contribuirán a “una mejor gestión de los residuos y facilitarán el aprovechamiento de los recursos naturales”.
En el acto intervinieron Isabel Elizalde, consejera de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local del Gobierno, Iñaki Urrizalki, gerente de Nilsa y Aritz Ayesa, presidente de la MCP. Aritz Ayesa explicó cómo el propio personal de mantenimiento de instalaciones y de la depuradora de Arazuri venían constatando un progresivo aumento de materiales impropios que dificultaban el funcionamiento de las redes y de los sistemas de bombeo. En concreto, en 2015 se tuvieron que limpiar, por acumulación de residuos, 201 kilómetros de colectores (la red de saneamiento tiene 1.688 kilómetros). Asimismo, se llevaron a cabo 195 desatascos de bombas de aguas residuales. Sin olvidar que este año 5.000 kilos de residuos sólidos impropios (de diferente tipo) fueron retirados diariamente en la entrada de la depuradora. Los residuos se acumulan en contenedores y son enviados a Góngora.
En su intervención, Isabel Elizalde señaló que muchos artículos de uso común en nuestros hogares o en nuestros centros de trabajo no existían hace 25-30 años; “estos artículos nos han permitido mejorar nuestra calidad de vida pero provocan impactos desconocidos hasta hace poco”, señaló la consejera, refiriéndose a productos químicos, toallitas, pañales o incluso medicamentos que ingerimos provocan también cambios sustanciales en la flora y fauna de los ríos.
Hay veces en que los grandes problemas tienen una apariencia pequeña; es el caso de las toallitas, “cuya larga vida pasa una gran factura en forma de averías y atascos”. Elizalde remarcó que “las depuradoras tratan residuos que conocemos, cada vez más eficientemente, pero, no están preparadas para tratar venenos, fármacos o los componentes de las toallitas. Hace falta más investigación para poder poner una solución satisfactoria”. Se ha avanzado mucho en la gestión del abastecimiento, del saneamiento y de la depuración, pero queda todavía camino por recorrer. Así, la gestión sostenible e integral del agua “es una preocupación y un objetivo de trabajo prioritario, una tarea que se realizará en colaboración directa con las mancomunidades, los distintos sectores de actividad, los colectivos y la ciudadanía”, abundó.
Por su parte, Iñaki Urrizalki, hizo referencia a los contaminantes emergentes: “muchos compuestos, cen-tenares probablemente, muchos de los cuales se usan en nuestros hogares, cuyos efectos negativos no se conocen del todo bien o cuando menos se sospechan”. Así, citó un conjunto muy variado de sustancias (plaguicidas, medicamentos y fármacos, entre otros) y elementos físicos entre los que se incluyen las toallitas húmedas, las compresas y los pañales”.