pamplona - Una pintada con el lema ¡Fuera casas de apuestas!, aparecida el pasado fin de semana, ha hecho público de nuevo el rechazo de parte de la población del barrio pamplonés de Buztintxuri a la existencia y ubicación del salón de juego instalado en la plaza de los Gigantes. Desde hace meses, los colectivos vecinales protestan por su presencia y afirman que su ubicación, cercana a un parque infantil, supone un grave peligro.

La sala de apuestas, en funcionamiento desde hace aproximadamente un año, se ubica en una de las principales plazas del barrio, a escasos metros de un parque infantil. Poco después de su apertura, varios colectivos de Buztintxuri, “rechazaron de forma unánime su presencia en el barrio”, afirmó Ohiane Gurutzeta, de la Asociación de Vecinos.

De hecho, otro colectivo, la Asociación Buztintxureando Txuri promovió una recogida de firmas, a través del portal virtual Change.org, que recabó los apoyos de 200 vecinas y vecinos. Para Hodei Sarasa, miembro de este colectivo, sólo su presencia es “un gran peligro pues supone que los niños y jóvenes normalizan el juego”.

La Asociación Buztintxureando Txuri es, además, el colectivo de acción preventiva comunitaria del barrio. “Su ubicación es muy mala y como asociación que trata con niños y jóvenes nos preocupa especialmente”, afirmó Sarasa. Aunque reconoció que en materia legal “no hay nada que hacer”, Sarasa apuntó que “muchas veces no existe ningún control de acceso a menores”.

A pesar del malestar y la oposición vecinal, tanto colectivos como Ayuntamiento reconocen que no existe ninguna queja formal al respecto de este local. “Es un tema que tenemos pendiente las asociaciones que trabajamos en el barrio”, admitió Sarasa.

Diversidad de opiniones La preocupación de los colectivos de Buztintxuri la secundan también madres y padres que disfrutan con sus hijos en el parque de la plaza de los Gigantes. “El lugar en el que está es erróneo”, afirmó Vanesa Fernández. “Parece que está elegido a mala fe, en el barrio hay muchos locales vacíos y justo está situado en frente de uno de los parques infantiles”, le apoyó Pedro González.

Otras madres, como Marina Machado, a pesar de llevar años viviendo en el barrio, reconoció que “nunca había reparado en que estuviera tan cerca del parque”, pero explicó que “desde luego no es el mejor lugar”.

Para otras madres la realidad es bien diferente. “La sala de apuestas no hace daño a nadie, entra quien quiere y quien no quiere no entra”, afirmó Naiara, sentada en la terraza de una cafetería entre el salón de juego y el parque infantil.

auge imparable Desde su regulación en el año 2011, el aumento de los locales que ofrecen apuestas deportivas en Navarra ha aumentado de forma imparable. Tanto es así que en la actualidad ya son cerca de 792 los locales en los que se puede apostar en Navarra. La gran mayoría (734) son locales, como bares y restaurantes, que tienen alguna máquina en su interior, 46 son salones de juego y 12 tiendas exclusivamente de apuestas.

Desde la Asociación de Ludópatas Aralar, única que trabaja la materia en Navarra, llevan años alertando de sus peligros. El miércoles, su presidenta Rakel Pardo denunciaba en este periódico un “inmovilismo político y administrativo que asusta”. Ayer fue el Parlamento de Navarra el que instó al Gobierno foral a regular la publicidad de apuestas y a prohibir la apertura de casinos en las proximidades de centros escolares.

Primera acción. En el año escaso que lleva en funcionamiento, esta pintada es la primera acción de repulsa contra el salón de juego de Buztintxuri.

Ocasión en diciembre. A pesar de que ha salido en varios foros de barrio, las asociaciones reconocen que no han presentado una queja en firme ante el Ayuntamiento. El 11 de diciembre tendrán una nueva oportunidad para plantearla en un nuevo foro.