Santa Engracia celebra su día y reivindica una Rochapea viva y dinámica
La asociación Mendialdea organiza desde hace más de 20 años la festividad
Pamplona - Santa Engracia no es la calle más larga de la Rochapea, ni tampoco la que más habitantes tiene. De hecho, se encuentra en la periferia del barrio y durante los últimos años ha experimentado un notable cambio poblacional, con un envejecimiento de los vecinos y un aumento de la inmigración. Sin embargo, Santa Engracia puede presumir de ser una de las calles más unidas, organizadas y festivas del barrio. Desde hace más de veinte años, la asociación vecinal Mendialdea organiza en abril el Santa Engratziaren Eguna, una jornada en la que vecinos y comerciantes se unen para celebrar sus vínculos y amistades.
“La primera vez que se organizó este día, aquí existía una tapia que nosotros derribamos para darle uso al terreno”, señaló Marisa Pérez, miembro de Mendialdea Auzo Elkartea. Aunque gran parte de la gente joven que vivía entonces en Santa Engracia se ha ido mudando a otros puntos de la ciudad, el día de ayer sigue siendo una fecha marcada en el calendario de muchos de ellos. “Algunas de esas personas han formado sus familias en otros sitios, pero se acercan a vernos en esta fiesta. Eso es muy bonito”, añadió Pérez.
El secreto de Santa Engratziaren Eguna es la buena relación vecinal y el ambiente que existe entre ellos. “Lo mejor del día es la alegría que invade a la gente. Nosotros intentamos dinamizar la Rochapea y que el barrio esté vivo”, destacó Pérez, que en este sentido alabó la implicación de los comerciantes y colectivos: “Siempre nos han mimado mucho y gracias a ellos esto puede organizarse”.
La comida autogestionada fue uno de los momentos clave del día de ayer y reúne, año tras año, a cinco o seis cuadrillas de unas veinte personas cada una. “Hay gente que, no sé si por la edad o por qué, ha decidido pasar de los calderetes e irse al bar, a mesa puesta, aunque luego nos juntamos todos”, confesó sonriente Marisa Pérez.
Los más pequeños también tuvieron hueco durante la jornada de ayer con la chocolatada, la actuación del mago Manu o los bailes de los dantzaris txikis de Ortzadar y de la Comparsa de Gigantes de la Rochapea.
Desde el motor de la celebración, Mendialdea Auzo Elkartea, subrayaron su agradecimiento al Ayuntamiento de Iruñea, que “nos permite preparar esta fiesta y otras actividades gracias a una subvención”. Además, el Consistorio ha cedido un espacio en el civivox a la asociación para organizar talleres de reordenación de la postura.
No obstante, los organizadores sostuvieron que lo fundamental es la participación de la gente. En especial, agradecieron a una de las vecinas su local para preparar los almuerzos y a Javier Abaigar “su trabajo incansable y desinteresado”.