45 terrazas covid serán permanentes en Pamplona a partir del 1 de julio

Estos 45 establecimientos hosteleros, diseminados por toda la ciudad, cumplen los tren requisitos que Labairu detalló en el Pleno celebrado el jueves: no afectar al tránsito de los peatones, no ocupar espacios más allá de la fachada del local y no haber recibido quejas por parte del vecindario a lo largo de este año y medio de permiso especial. En total, supondrían 112 mesas bajas y 49 barriles o mesas altas nuevos.

La mayoría de estos 45 establecimientos de hostelería, comentó el edil de Seguridad Ciudadana, no disponían de mesas y sillas en la calle antes de la llegada de la pandemia, por lo que la mayoría apostará por mantenerlas. En tal caso, y a diferencia de cuando eran terrazas covid, sí que tendrían que abonar la tasa por ocupación de la vía pública, que, por ahora, el Consistorio mantiene suspendida hasta finales de año.

Por otro lado, quedan otras 226 terrazas covid -676 mesas bajas y 107 barriles- que no cumplen alguno de los tres parámetros fijados por el área de Seguridad Ciudadana. “También nos vamos a dirigir individual y personalmente a cada uno de estos establecimientos hosteleros y vamos a intentar subsanar los errores que presentan. En algunos casos es sencillo porque consiste en quitar una o dos mesas. De esta manera, conseguirían una terraza sin ningún tipo de afección, cumplirían la ordenanza municipal y, si desean, podrían contar con una licencia permanente”, avanzó Labairu.

Como se recordará, Navarra Suma -en esta última ocasión, sin informar al resto de grupos municipales- prorrogó hace dos semanas los permisos especiales hasta el próximo 1 de julio. A partir de esa fecha, señaló Labairu, desaparecerán todas las terrazas covid que no se ajusten a las tres condiciones presentadas el jueves y a la ordenanza municipal que regula la instalación de estos elementos hosteleros en la vía pública.

adiós a las carpas En estos dos últimos años, el Ayuntamiento de Pamplona ha autorizado e instalado 58 carpas o jaimas que se expandieron por el paseo Sarasate, los aledaños de la plaza de toros, en el Archivo General o en el Museo de Navarra.

Estas instalaciones fueron fundamentales para la economía de bares y restaurantes, sobre todo cuando las restricciones para frenar el avance del coronavirus impedían el consumo en los interiores. Sin embargo, conforme desaparecían las limitaciones, las carpas o jaimas dejaron de formar parte de la iconografía visual de la ciudad.

El Ayuntamiento ordenó la semana pasada la retirada de las 22 carpas que aún seguían montadas en la ciudad. De estos 22 establecimientos, 20 ya contaban con terraza antes de solicitar la jaima, por lo que la mantendrán pero sin esta estructura. Los dos bares restantes no disponían de terraza antes de la pandemia, pero ya cuentan con el visto bueno de Seguridad Ciudadana para mantenerla.

“En algunos casos, pueden conseguir el permiso quitando una o dos mesas”

Concejal de Seguridad Ciudadana