La Policía Municipal de Pamplona ha alertado este viernes de nuevos robos en la capital navarra por el método del abrazo. En esta ocasión, el robo se ha producido en la zona del parque de Antoniutti y el objetivo de los ladrones ha sido una cadena propiedad de un hombre de 85 años. "Desconfía de las personas desconocidas que se acercan para abrazarte e intenta mantener las distancias para evitar disgustos", ha aconsejado Policía Municipal en sus redes sociales. También la Policía Foral advirtió en julio de una oleada de robos con esta técnica que afectó a Irurtzun, Olazti-Olazagutía, Altsasu-Alsasua, Noáin y Pamplona, que en julio ya había registrado robos con abrazo.

El abrazo solidario es una técnica de hurto cuyo “modus operandi” consistente en aproximarse a una víctima, normalmente de avanzada edad y no acompañada, que porta objetos de valor en cuello o muñecas. Tratan de embaucarla mediante saludos efusivos, aparentando que le conocen, solicitando información de cualquier tipo o, incluso, ofreciéndoles favores sexuales. Mientras llevan a cabo esta conversación de distracción, las víctimas son sujetadas de manos y brazos, buscando hurtarles collares, pulseras, relojes o cualquier objeto de valor. Las autoras demuestran gran habilidad para abrir o forzar los cierres de las joyas o relojes. Ello, unido a que la víctima se sienta sorprendida e incómoda por el acercamiento de una desconocida efusivamente, hace que no reparen en que les están sustrayendo los objetos de valor. En ocasiones, no es hasta minutos más tarde cuando echan en falta el objeto y se han dado casos en los que se ha empleado la violencia si la víctima se ha percatado del hurto.

Los delitos se producen en la vía pública y zonas frecuentadas por personas de edad avanzada, como centros de salud, religiosos, residencias de mayores, sociedades de jubilados o zonas de paseo. En otras ocasiones se realiza un pequeño seguimiento a las víctimas, actuando en cercanías del portal y abordándoles cuando van a acceder al domicilio. Se aconseja, finalmente, desconfiar de desconocidos que se nos acerquen invadiendo nuestro espacio personal, sobre todo si se muestran efusivos y cariñosos (no permitir por tanto el contacto físico).

También se recomienda evitar transitar en solitario, hacer ostentación de joyas o relojes de alto valor económico, revisar el estado de los cierres de estos objetos y guardar fotografías de los mismos para que si alguno de ellos es sustraído, se pueda aportar al presentar la denuncia.