La reyerta ocurrida durante el último fin de semana en torno al edificio abandonado de Etxabakoitz, cuyo último uso fue Jazar, un espacio cooperativo de creación cultural, fue objeto de debate ayer en la comisión de Presidencia del Ayuntamiento. Los portavoces del PSN y PP pidieron conocer los detalles de la situación y el concejal de Seguridad y Convivencia, Endika Alonso, se comprometió a ofrecer todos los datos sobre la intervención y anunció una reunión esta semana con los vecinos.
Fue después Javier Labairu (UPN) quien sugirió “si no se puede adoptar una solución como en su día Argal” (las naves que en su día también se derribaron en el barrio), a lo que Joxe Abaurrea le dijo: “Lo que no vamos a hacer es lo que hizo usted en Aranzadi, abandonarlo durante 4 años” y añadió que en Etxabakoitz se van a hacer “todas las intervenciones para establecer un espacio de seguridad y salubridad”.
Recordó que el derribo de Argal lo hizo también el Ayuntamiento de Asiron, “porque había chavales que jugaban con riesgo de su integridad física”, pero añadió que fue una actuación compleja, ya que “hubo que modificar el PSIS de Etxabakoitz”, por lo que avanzó que no será fácil en Jaso.
PSN: “Exigimos respuestas inmediatas”
El Partido Socialista de Pamplona mostró en un comunicado su “profunda preocupación por la situación de absoluto abandono de la Ikastola Jaso y su entorno ante los últimos acontecimientos relacionados con el edificio sucedidos el fin de semana”. La problemática “se lleva arrastrando desde hace años, sin que el vecindario del barrio de Etxabakoitz haya recibido ningún tipo de respuesta municipal”, por lo que exigen “respuestas inmediatas a EH Bildu para garantizar la seguridad y la convivencia, tanto en Etxabakoitz como en las inmediaciones de la calle Descalzos, desde donde también se han recibido quejas por parte del vecindario”.